Las organizaciones de regantes del río Bío Bío advirtieron que es altamente posible un escenario de sequía, debido a la falta de agua en dicho curso fluvial, sumándose a la inquietud manifestada en la víspera por los canalistas del Laja.
Es que además de la escasez de precipitaciones en el pasado invierno, también inquieta la exigua acumulación de nieve en las partes altas de la cordillera, ya que justamente los deshielos permiten alimentar el río Bío Bío en la época primavera-verano.
A lo anterior se suma que la operación de las represas Ralco y Pangue se produce a contrapelo de los requerimientos de los regantes, lo que dificulta la disponibilidad del recurso.
Rodrigo Romero, ingeniero administrador de la Asociación de Canalistas Bío Bío Norte, sostuvo que con dicho panorama ad portas, la temporada de riego no se avizora auspiciosa.
El directivo adelantó que en ese escenario, las organizaciones de regantes procurarán hacer uso de los derechos de aprovechamiento pero admitió que eso afectará la disponibilidad del recurso hídrico en quienes estén aguas abajo.
Rodrigo Romero sostuvo que ese menor caudal podría traer consecuencias negativas en los procesos productivos y en asentamientos humanos que existen en torno al río Bío Bío.
En dicho curso fluvial, las principales organizaciones de regantes son las Asociaciones Canal Bío Bío Norte, Bío Bío Sur y Bío Bío Negrete que, en conjunto, irrigan alrededor de 60 mil hectáreas.
