Génova, club de la Serie A italiana, fue multado con 30.000 euros y su delantero Giuseppe Sculli fue suspendido un mes por hechos que se remontan al mes de abril, anunció este martes la Comisión de disciplina de la liga italiana.

Estas sanciones están ligadas a los hechos ocurridos durante el partido de Serie A en casa contra el Siena en abril pasado cuando los “Ultras” del Génova, furiosos por los cuatro goles encajados por su equipo, protagonizaron incidentes en las tribunas.

Los aficionados lanzaron bengalas al terreno y reclamaron sus camisetas a los jugadores del Génova, acusándolos de no ser dignos de llevarlas.

Todos, a excepción de Sculli, cedieron antes de que este último lograra, aparentemente tras largos minutos de negociación con los “Ultras”, recuperarlas.

El partido se reanudó tras una interrupción de 45 minutos para terminarse con una derrota por 4-1 y el club genovés, temiendo reacciones violentas, decidió desplazar el lugar de entrenamiento del equipo a Milán, hasta la jornada siguiente de campeonato.

Sculli, nieto de un célebre padrino de la mafia calabresa, fue acusado de haber estado al corriente antes del encuentro de las manifestaciones previstas por los tifosi.

Los responsables de la liga italiana de fútbol habían reclamado en un primer momento una multa de 300.000 euros al Génova y una suspensión de tres meses para Sculli.