Varios aviones turcos bombardearon bases rebeldes kurdas en el norte de Irak durante la noche del domingo al lunes, informaron fuentes militares a la AFP.

Al menos 12 aviones caza-bombarderos F-16 despegaron de la base de Diyarbakir y atacaron cuatro campamentos rebeldes kurdos en las montañas Kandil y sus alrededores, donde está situada la comandancia de la organización separatista, precisaron las mismas fuentes, aunque se desconoce si hay víctimas.

El pasado viernes, el gobierno turco pidió al parlamento que renovase su autorización un año más para seguir atacando bases rebeldes en el Kurdistán iraquí, tras varios meses de violencia en aumento.

Desde finales de los años 1990, Turquía tiene varias bases militares en la región autónoma de Kurdistán, en el norte de Irak, donde está la comandancia del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), que se alzó en armas en 1984 en un conflicto que dejó desde entonces unos 45.000 muertos.