Millones de brasileños comenzaron a votar la mañana de este domingo para escoger a más de 5.550 alcaldes, en unas elecciones municipales que tienen como telón de fondo un histórico juicio por corrupción que afecta al gobernante Partido de los Trabajadores (PT).

Unos 138,7 millones de electores están convocados para votar en estos comicios con la apertura de los centros de votación, donde todo se desarrollaba de manera normal, según un primer reporte de la autoridad electoral brasileña.

Los centros de votación, que en total acogen medio millón de urnas, permanecerán abiertos hasta las 17H00 (20H00 GMT), y los primeros resultados se esperan en la noche del domingo.

“Muchos han nacido en democracia, pero muchos otros recuerdan el hecho de no poder votar”, declaró desde Porto Alegre (sur) la presidenta Dilma Rousseff, una ex guerrillera detenida y torturada por la dictadura militar (1964-1985).

“Las elecciones son una fiesta inmensa”, comentó la mandataria.

En estos comicios, antesala de las presidenciales de 2014, el PT -que gobierna Brasil desde hace casi 10 años- buscará aumentar su poder pese al histórico juicio en su contra que comenzó en la Corte Suprema hace más de dos meses.

El proceso busca determinar la responsabilidad de exministros, dirigentes históricos del partido y empresarios en un sistema de contabilidad ilegal presuntamente destinado a la compra de votos de diputados de la coalición durante el primer gobierno del ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010).

Lula, que no figura entre los acusados, ha participado directamente en la campaña apoyando a candidatos del PT, sobre todo a Fernando Haddad para la alcaldía de Sao Paulo, así como a candidatos de partidos que integran la coalición de gobierno.

En las municipales de 2008, el PT logró 558 alcaldías contra 1.207 del centrista PMDB y 788 del opositor Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB). Según analistas, el PT podría aumentar su poder en estas elecciones.

Lula aseguró este domingo que la gente “no está preocupada” por el ‘mensalao’ y que éste no influirá en la votación del candidato del PT en Sao Paulo.

“El pueblo no está preocupado. Estamos preocupados por si el Palmeiras va a descender (a la segunda división del fútbol brasileño) o si Haddad va a ganar”, bromeó el ex mandatario durante un desayuno con dirigentes del PT.

“Ustedes son testigos de que en estos dos meses de campaña nunca fui cuestionado sobre ese asunto en la calle. Las personas saben diferenciar las cosas”, ratificó de su lado Haddad, ex ministro de Educación de Lula.

Los sondeos mostraban una reñida carrera para la alcaldía paulistana entre el abogado populista y ex presentador de televisión Celso Russomanno, candidato del conservador Partido Republicano Brasileño, y el aspirante del PSDB, José Serra, un veterano político que también fue candidato presidencial y gobernador del estado de Sao Paulo.

De acuerdo con la encuestadora Datafolha, Serra tiene 28% de las preferencias de voto, Russomanno un 27% y Haddad 24%. De su lado, el instituto Ibope señalaba un empate con 26% de intención de voto para cada candidato.

En las ciudades con más de 200.000 electores en las que el candidato más votado no logre mayoría absoluta, como se estima ocurrirá en Sao Paulo, se celebrará una segunda vuelta el 28 de octubre.

En Rio de Janeiro, el alcalde centrista Eduardo Paes se encamina a la reelección en primera vuelta con un 66% de las opciones según Datafolha, que lo convertiría en el alcalde de la ciudad para los Juegos Olímpicos de 2016.

Además de alcaldes para un período de cuatro años, los brasileños escogerán también unos 48.000 concejales, sobre unos 450.000 candidatos de más de 20 partidos políticos.

Unos 40.000 efectivos de las Fuerzas Armadas fueron desplegados este domingo en 393 municipios del país para garantizar la seguridad. Sólo el estado de Rio de Janeiro dispondrá de 6.500 militares en ocho grandes ciudades, entre ellas la capital, Rio, y sus conflictivas favelas, muchas de ellas aún en manos de bandas de narcotraficantes o de milicias parapoliciales.