El Partido Ettahrir acusó al presidente tunecino Moncef Marzuki de apostasía, y le pide que deje de comportarse como un “enemigo de Dios”, en un comunicado publicado este viernes en Túnez.

“Moncef Marzuki, no sea un enemigo de Dios”, se lee en el comunicado que denuncia unas declaraciones a la prensa en Nueva York en las que el presidente tunecino denunciaba la violencia salafista.

“Presentarse como un dirigente que se opone a la alternativa islamista y que se presenta como garante de la no inclusión de la charia (ley islámica) en la Constitución del país y en sus leyes, es una señal de apostasía”, afirma Ettahrir.

Este partido fundamentalista, legalizado en mayo de 2011, pide al presidente que “se calle, respete sus límites y no sea un enemigo de Dios”.

Ettahrir integra a una decena de formaciones políticas islamistas radicales nacidas tras la revuelta que derrocó al expresidente Zine El Abidine Ben Ali en enero de 2011.