El gobierno de Siria admitió a las autoridades de Turquía que varios obuses disparados por sus fuerzas armadas cayeron en territorio turco y pidió disculpas por lo ocurrido, según dijo este jueves el vice primer ministro turco, Besir Atalay.

“La parte siria admitió lo que había hecho y pidió disculpas”, dijo el alto dirigente a la prensa. Atalay añadió que la luz verde aprobada por el parlamento para llevar a cabo acciones del ejército turco en la frontera con Siria “no es una moción por la guerra”.

En tanto, el parlamento de Turquía adoptó este jueves una moción del gobierno autorizando a las Fuerzas Armadas a conducir “si fuera necesario” operaciones en Siria tras este grave incidente, que costó la vida a cinco civiles turcos.

El texto de la moción fue adoptado con el voto favorable de 320 legisladores, contra 129 en contra. La asamblea nacional turca se reunió en sesión especial a puerta cerrada, indicaron las cadenas turcas de televisión.