El bajista del grupo inglés Muse, Christopher Wolstenholme, ha recibido algunos ultimátums por parte de sus compañeros, para que logre dejar sus adicciones alcohólicas debido a que éstas están perjudicando el futuro de la banda.

Así lo informó la revista NME, que consignó las palabras del baterista y también miembro del grupo, Dom Howard, asegurando que este problema data desde hace muchos años, sin embargo, Wolstenholme supo ocultarlo.

Pero hubo una ocasión en el Día de los Inocentes de 2009, en que el bajista colapsó y no tuvo más remedio que confesar su adicción y pedir ayuda.

Desde aquel día él y la banda han trabajado en conjunto para solucionar el problema, no obstante, Wolstenholme ha recaído en su adicción en constantes situaciones, llegando a beber grandes cantidades de alcohol antes de salir a escena y, también, durante los conciertos.

“Ahora Chris dice cosas como que no puede creer que lo aguantáramos durante 10 años. Lo cual es cierto. No puedo creerme que lo hiciéramos. Pero lo hicimos. Siempre he creído en la integridad de la banda y en seguir juntos.”, indicó Howard.

Mientras tanto, Wolstenholme afirmó que desde hace un tiempo se ha dedicado de lleno a la música, como no lo había hecho durante los 10 años, tiempo que lleva la banda en los escenarios. “Suena cursi, pero es lo único que me hace sentir en paz”, confensó el bajista.

Respecto a los proyectos del grupo liderado por el vocalista Matthew Bellamy, este 1 de octubre lanzarán en Inglaterra su sexto álbum llamado The 2nd Law el que al día siguiente será estrenado en Estados Unidos.