La Segunda División Profesional nació sin previo aviso y era cuestión de tiempo que se destaparan todos los problemas económicos que trajo consigo para los clubes participantes.

Primero fue Provincial Osorno el que tuvo que dejar obligado la categoría por no cumplir con un pago de ingreso, que según dijeron en su momento los directivos lecheros, nunca se les dijo que debían cancelar.

Ahora, Fernández Vial y Melipilla, entre otros, están reflejando todas las falencias de un torneo con poco futuro.

La descripción que hace el técnico de los aurinegros, Nibaldo Rubio, es categórica tras el 1-0 en contra de Deportes Melipilla en cuanto a la preparación y la presentación para el juego.

“No es de esta semana. Se viene arrastrando durante todo el año. Teníamos 12 jugadores en la cancha, un arquero, sin suplentes, jugamos con dos lesionados. Tratamos de hacerlo lo más honroso, se les adeudan dos meses y dicen que el jueves les van a pagar. Los dirigentes de Fernández Vial no existen, así que es difícil hablar con ellos. No tienen palabra, dejan a los muchachos botados. Esto no es fútbol profesional. Una lástima, hay equipos que tienen problemas. Es una lástima por este campeonato y que Sergio Jadue se haya prestado para este tipo de torneos. Nadie sabe el fin de este torneo”, dijo.

Agregó que “es lo mismo que organizar un asado y no tengo plata para comprar la carne. Es un desastre esta dirigencia para organizar estos torneos”, remató.

El DT de los ‘Potros’, Orlando Mondaca, por su parte, dijo que la situación no es tan diferente en su equipo: “El ánimo no es de los mejores y debo cuidarlos en la semana, para que no hayan roces. Andan irascibles y debemos controlarlos para no dañar más el trabajo. No están los pagos, no hay dineros para movilización…”

Luis Bustos, el presidente de Melipilla, no ocultó los hechos: “No se ha cumplido por no desearlo, sino que la capacidad de endeudamiento tiene un límite y no hemos tenido para cumplir y para hacer mayores inyecciones de recursos”, señaló.

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