Una veintena de científicos, una empresa rusa y una agencia gubernamental estadounidense fueron distinguidos en Harvard (Cambridge, noreste de Estados Unidos) con los premios Nobel alternativos por trabajos sobre la Torre Eiffel, la actividad cerebral de un salmón muerto o el equilibrio de fuerzas de una cola de caballo en el cabello humano.

La ceremonia de la 22ª edición de los Premios Ig Nobel se llevó a cabo el jueves por la noche en el Teatro Sanders de la Universidad de Harvard, con la presencia de varios de los galardonados, que sólo reciben una mención y no un premio en efectivo.

Los premios Nobel alternativos distinguen a la “investigación que hace que la gente RÍA y después PIENSE”, según el sitio internet de los organizadores.

En Neurociencia, por ejemplo, el galardón fue para los estadounidenses Craig Bennett, Abigail Baird, Michael Miller y George Wolford, que demostraron que los investigadores del cerebro pueden probar, a través de la utilización de complicados instrumentos y estadísticas simples, actividad cerebral coherente en cualquier parte, incluso en un salmón muerto.

En Psicología, los premiados fueron Anita Eerland y Rolf Zwaan (Holanda) y Tulio Guadalupe (representante de un equipo de Perú, Rusia y Holanda) por su estudio “Inclinarse a la izquierda hace que la torre Eiffel parezca más pequeña”, publicado en una revista de esa disciplina.

El premio en Acústica se adjudicó a los japoneses Kazutaka Kurihara y Koji Tsukada, que crearon una máquina que perturba el discurso de una persona haciéndolo oír sus propias palabras con una leve diferencia de tiempo.

En Física, Joseph Keller (EEUU), Raymond Goldstein (EEUU y Reino Unido), Patrick Warren y Robin Ball (Reino Unido) se llevaron el galardón por calcular “el equilibrio de fuerzas que da forma y mueve una cola de caballo en el cabello humano”.

Los Ig Nobel no solo premian a personas, sino también a compañías y gobiernos.

En ese marco, el premio de la Paz fue entregado a la empresa rusa SKN por “convertir en diamantes nuevos a antiguas municiones” de ese país, y el de Literatura correspondió a la Oficina de Contaduría General del gobierno estadounidense por difundir “un informe de informes de informes que recomienda la preparación de un informe del informe de informes de informes”.

Una de las curiosidades de la ceremonia es que los premios son entregados por verdaderos laureados con el Nobel.

Este año estuvieron presentes el químico Dudley Herschbach (Premio Nobel en 1986), el economista Eric Maskin (2007) y el físico Roy Glauber (2005).