La bailarina argentina Olga Ferri murió este fin de semana en Buenos Aires. Alumna de Esmée Bulnes, había nacido el 20 de septiembre de 1928. Así lo informó ayer el Teatro Colón, a través de su departamento de prensa.

Luego de su paso por la Escuela de Danza del Teatro Colón, Olga Ferri integró el Ballet Estable como solista (a los dieciocho años) y fue primera bailarina a partir de 1949. Como tal, protagonizó estrenos de obras con coreografías de Margarita Wallmann, Leonide Massine, Heinz Rosen, Jack Carter y Rudolf Nureyev, entre otros.

Su carrera internacional recorrió los escenarios de París, Londres, Munich, Berlín, destacándose como solista del Ballet del Marqués de Cuevas y del London Festival Ballet.

En 1971 Rudolf Nureyev la eligió para acompañarlo en el estreno de su versión de El cascanueces en el Teatro Colón. Desde ese mismo año, compartió ininterrumpidamente su actividad como bailarina con la docencia, fundando junto a su marido, el bailarín Enrique Lommi, su estudio particular. Por esa sede pasaron gran cantidad de alumnos que gracias a sus enseñanzas transitaron carreras internacionales: su discípula dilecta, Paloma Herrera, hoy bailarina del American Ballet Theatre. Iñaki Urlezaga, Ludmila Pagliero (primera bailarina del Ballet de la Ópera de París) y muchos otros bailarines que hoy revistan en compañías de Italia, Alemania y toda Europa. También recibieron allí su formación buena parte de los integrantes del actual Ballet del Teatro Colón, testigos y recipiendarios de su labor docente, la cual ejerció con entrega y perfección técnica.

En 1977 Olga Ferri se retiró oficialmente de la danza con Coppelia.

En dos oportunidades fue directora del Ballet Estable del Teatro Colón, la última durante la temporada 2008.

Fue autora del libro La danza y sus lesiones más frecuentes, escrito en colaboración con el médico traumatólogo Luis Pintos.

Entre las distinciones que obtuvo figuran el Premio Konex de Platino (1989), el Gran Premio de Honor del Fondo Nacional de las Artes (1977), la Orden al Mérito de los Caballeros de San Martín de Tours (1984) y el nombramiento como Ciudadana ilustre de la Ciudad de Buenos Aires (2008).