Un organismo de control de Washington sobre Afganistán investigará la pérdida, por parte del comando estadounidense de la OTAN, de documentos financieros sobre la compra de combustible por más de 475 millones de dólares para el ejército afgano.

Todos los documentos relacionados con compras de combustible para el ejército afgano entre octubre de 2006 y febrero de 2011 fueron destruidos, indicaron responsables estadounidenses y de la OTAN a la Inspección General Especial para la Reconstrucción de Afganistán (Sigar, por su sigla en inglés), encargada de verificar el destino de los fondos gubernamentales en el país.

El inspector general especial, John Sopko, afirmó que su oficina investigará un eventual fraude en relación a la pérdida de los documentos y exhortó al secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, a realizar su propia pesquisa.