El gigante John Isner, décimo del ránking mundial, Sam Querrey, 28 de la ATP, y la pareja de hermanos Mike y Bob Bryan representarán a Estados Unidos en las semifinales de Copa Davis ante España, que se jugarán del 14 al 16 de setiembre en Gijón (Asturias).
Los estadounidenses no contarán con su mejor raqueta en estos duelos en la última década, Andy Rodick, quien anunció su retiro del tenis profesional después del Abierto de Estados Unidos, que se juega en Nueva York.
El equipo de las barras y las estrellas enfrentará a una España disminuida sin su estrella Rafael Nadal, y que descansa sus posibilidades de éxito en David Ferrer, Nicolás Almagro, Marcel Granollers y Marc López, y en una superificie que le favorece.
“Esa la pregunta, ir a España y jugar con ellos en arcilla roja, donde no han perdido desde hace mucho tiempo”, dijo el capitán estadounidense Jim Courier al dar a conocer su nómina este martes.
“Ciertamente, no somos los favoritos y esperamos nos vaya bien en los dos primeros partidos individuales”, añadió Courier.
España, vigente campeón de Copa Davis, se verá afectada por la ausencia de Nadal, quien ha estado batallando con problemas de rodilla desde hace meses y se saltó los Juegos Olímpicos y el Abierto estadounidense para recuperarse.
El lunes había anunciado que estaría aún otros dos meses ausente del circuito.
Courier espera un reto difícil de todos modos, dado que Ferrer es el quinto en el ranking mundial y Almagro el duodécimo, mientras la pareja Granollers-López lleva un tiempo jugando con éxito en el circuito de la ATP.
“Va a ser duro, no hay duda al respecto. Pienso que tenemos un chance, pero todo depende, repito, de cómo nos vaya en los dos primeros partidos individuales”, insistio Courier, capitán de Estados Unidos desde 2010, cuando sustituyó a Patrick McEnroe.
Bajo la guía de Courier, los estadounidenses eliminaron en primera ronda a Suiza y derrotaron de visitantes a Francia en los cuartos de final. En caso de vencer a España tendrían que medirse con el ganador de la otra llave de semifinales, entre Argentina y República Checa, en la final prevista en noviembre.
“Hemos tenido el calendario más duro que se pueda tener en la Copa Davis”, dijo Courier, exnúmero uno mundial y ganador de dos Copas Davis con Estados Unidos en 1992 y 1993.
“Si llegamos a la final, vamos a tener que virar la mesa”, señaló el capitán norteamericano.
La otra gran preocupación pasa por el estado físico de Isner, quien este año ha jugado 20 torneos, incluidos los de los Juegos Olímpicos y los cuatro del Gran Slam.
Isner fue eliminado en tercera ronda del US Open, por lo que tendrá al menos dos semanas para descansar antes de viajar a España.
“Tendrá más descanso, y lo necesitará. El mismo se ha sobrecargado con su calendario y tendrá que aprender de eso. Está muy entusiasmado con la Copa Davis, pero va a tener que estar fresco y descansado para poder vencer a Ferrer y Almagro”, apuntó Courier.
Además de Roddick, Estados Unidos no podrá contar con Mardy Fish, 25 jugador mundial, quien está fuera hasta finales de este año después de retirarse del Abierto neoyorquino con problemas de salud.
“Andy ciertamente ha dejado la barra muy alta. Ha sido el líder del equipo en la última década. Sin dudas el equipo lo extrañará, pero la vida sigue y hay que seguir adelante”, subrayó Courier.
España y Estados Unidos se han enfrentado en diez ocasiones en Copas Davis, con cinco victorias per cápita.
