Enrique Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), fue declarado este viernes presidente electo de México para el periodo 2012-2018 por el Tribunal Electoral, que en una votación unánime calificó como válidas las elecciones del 1 de julio.

Tras validar las elecciones “se resuelve que el candidato que obtuvo la mayoría de votos en las elecciones para presidente de acuerdo con el cómputo es el ciudadano Enrique Peña Nieto (…) presidente electo”, dijo José Alejandro Luna Ramos, presidente del Tribunal luego de la votación.

Según la resolución del Tribunal Electoral sobre 50 millones de votos el PRI, en la alianza Compromiso con México con el minoritario Partido Verde, obtuvo 19,1 millones de votos (38,2%), seguida por la coalición izquierdista con 15,8 millones (31,6%) y el conservador Partido Acción Nacional (gobierno) con 12,7 millones (25,4%).

Luna Ramos explicó que el siguiente paso es la entrega de la constancia de mayoría para Peña Nieto, que se espera que la tarde de este viernes acuda a la sede del Tribunal Electoral, que se encontraba fuertemente resguardado por fuerzas federales ante la presencia de unos cientos de manifestantes.

Peña Nieto, un abogado de 46 años, asumirá el 1 de diciembre para el periodo 2012-2018.

“Arribo a la convicción de que la elección que ahora se califica fue un procedimiento electoral libre, auténtico y equitativo en términos de la Constitución”, dijo durante la discusión el magistrado Flavio Galván.

En la resolución del tribunal se reconocieron “algunos problemas (principalmente errores humanos), pero han podido resolverse adecuadamente y en el marco del derecho”, dijo de su lado la magistrada María del Carmen Alanis.

El jueves, el Tribunal, cuyos fallos son inapelables, desestimó la querella presentada por la coalición de izquierda y su candidato Andrés Manuel López Obrador para declarar inválida la elección por la presunta compra masiva de votos y el uso excesivo de recursos por parte del PRI.

“Las elecciones no fueron ni limpias, ni libres, ni auténticas, en consecuencia, no voy reconocer un poder ilegítimo surgido de la compra del voto y de otras violaciones graves a la constitución y las leyes”, dijo López Obrador este viernes al llamar a sus seguidores a la “resistencia civil” pacífica.