En el marco del seminario sobre posibilidades agroindustriales de berries, desarrollado por la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Austral, el presidente de los pequeños productores de frambuesas, Gerardo Orellana, afirmó que las huellas de la erupción son imborrales y que sus efectos se reflejarán en ésta y la próxima temporada de cosechas.

El dirigente afirmó que lo anterior obedece a que no han contado con los recursos necesarios para recuperar los huertos en su totalidad.

En este sentido, Orellana explicó que los afectados por el fenómeno natural están llevando adelante un manejo de sobreviviencia puesto que los recursos aportados por el gobierno fueron insuficientes y tardíos.

Una postura que comparte el productor de La Unión, Luis Aguilera, quien afirmó que si bien los usuarios de Indap recibieron escaso apoyo, aquellos que sólo dependen del sistema financiero no han contado con ello. El afectado acusó incumplimientos por parte de las autoridades del agro.

Entre los compromisos figura la posibilidad de un subsidio para la contratación de mano de obra, hecho que hasta ahora no ha ocurrido, según los frambueseros. Por esta razón llamaron a las autoridades a tomarles en cuenta, puesto desde que se registró la erupción en junio de 2011 figuran como un rubro desconocido.