“Decenas de cuerpos más de ciudadanos no identificados” fueron hallados en la localidad siria de Deraya, en la región de Damasco, indicó la noche del sábado al domingo el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).

Este mismo sábado, el OSDH había anunciado que “entre 40 y 50 cuerpos habían sido hallados” en Deraya, donde 109 civiles y rebeldes murieron en los últimos cuatro días en una vasta operación militar, según la organización.

Los descubrimientos macabros de este tipo, a menudo cadáveres de víctimas de ejecuciones sumarias, se multiplican en Siria desde hace unas semanas.

Violentos combates oponían el sábado a rebeldes y soldados en Alepo, la segunda ciudad de Siria, sometida a bombardeos.

Desde que empezó la revuelta contra el presidente Bashar al Asad en marzo de 2011, la violencia ha dejado 25.000 muertos, según el OSDH, y más 200.000 sirios han huido a países vecinos, según el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR).