La agencia de calificación financiera Fitch anunció el viernes que mantendrá la nota soberana de España si pide un rescate global de su economía, lo que ilustra el aumento de la presión para que el país decida por esa opción.

España, a la que la zona euro ya prometió en junio una ayuda de hasta de 100.000 millones de euros para sus bancos, debilitados por el estallido de la burbuja inmobiliaria, podría verse obligada en otoño (boreal) a pedir un rescate más amplio para su economía, a través de una acción del Banco central europeo (BCE).

“Una solicitud del gobierno español para una ayuda financiera suplementaria ante el Fondo de estabilidad financiera (FESF), bajo forma de compra de deuda soberana española en el mercado primario o secundario, no repercutirá negativamente en la nota por parte de Fitch”, dijo la agencia, dos días después de un anuncio similar hecho por Standard & Poor’s.

Tal apoyo del FESF y del MES, “sobre todo si va acompañada por compras en el mercado secundario por el BCE, reduciría significativamente el riesgo de una crisis de liquidez y ayudaría al gobierno español a tener acceso posible a la financiación en el mercado y a disminuir la presión sobre su nota soberana”, destacó Fitch.

El miércoles, la agencia Standard & Poor’s también dijo que si España pedía un rescate global de su economía ante la Unión europea o ante el FMI, no causaría un impacto directo sobre su nota soberana (BBB+).

La presión sigue subiendo para que el país solicite un rescate financiero más amplio: el banco Goldman Sachs consideró el miércoles que la cuarta economía de la zona euro debería presentar su solicitud a mediados de septiembre, esperando conocer el apoyo que le propone el BCE.