Un tribunal brasileño condenó a la multinacional estadounidense de agroquímicos Monsanto a pagar 500.000 reales (unos 250.000 dólares) por una publicidad engañosa sobre la soja transgénica, según un fallo de segunda instancia divulgado este miércoles.

La compañía difundió en 2004 una publicidad que exaltaba el uso de semillas modificadas genéticamente cuando aún eran prohibidas en Brasil, aduciendo que eran benéficas para el medio ambiente, recordó el Tribunal Regional Federal de la cuarta región, con sede en la ciudad Porto Alegre (sur).

Monsanto “realizó propaganda abusiva y engañosa, pues enalteció un producto cuya venta era prohibida en Brasil y no aclaró que sus pretendidos beneficios son muy cuestionados en el medio científico”, señaló el juez instructor del caso, Jorge Antonio Maurique.

La empresa, que podrá apelar el fallo ante el mismo tribunal, declinó comentar la decisión y espera la notificación oficial para analizar los siguientes pasos, señaló a la AFP a través de su centro de prensa.

La corte regional aceptó un recurso de apelación presentado por la fiscalía y dejó sin efecto un fallo anterior que absolvía a Monsanto, uno de los principales productores de agroquímicos en el mundo.

De ratificarse el fallo, la multinacional deberá pagar al Estado brasileño los 250.000 dólares de indemnización y difundir una publicidad con los efectos negativos de los herbicidas a partir de los cuales se modifican las semillas de soja.

Monsanto enfrenta desde hace cuatro años otra millonaria demanda en Brasil por el cobro de sus semillas modificadas de soja, que estuvieron prohibidas en el país hasta la década pasada.

Hoy se calcula que un 85% de las plantaciones de soja de Brasil, segundo exportador mundial del grano, contienen las semillas que fueron alteradas genéticamente para contrarrestar los efectos de los herbicidas.