La gubernamental Dirección Estratégica de Reivindicación Marítima de Bolivia (Diremar) estimó este domingo “preocupante” que Chile considere una nueva estrategia de seguridad y defensa 2012-2014 con un presupuesto militar que supuestamente asciende a 3.000 millones de dólares.

“Esta actitud chilena es preocupante para todos los países de la región, además de ser delicado porque ese país ingresó a una serie de contradicciones entre lo que dice y lo que hace, cada vez con mayor desparpajo, actitudes y medidas que parecen representar el preludio de una guerra”, dijo en un comunicado Juan Lanchipa, director de Diremar.

Ese proyecto, asegura, “establece un presupuesto cuatrienal que no podrá ser inferior al 70% del monto invertido en armamento entre 2001 y 2010, que fueron precisamente los años que más dinero se invirtió en compras militares (en promedio 1.900 millones de dólares anuales)”.

Según el documento, divulgado por la agencia oficial de noticias ABI, esta es la razón por la que Chile “crea un Fondo de Contingencia Estratégico que dispondrá de cerca de 3.000 millones de dólares ‘destinado a financiar el material bélico (?) para enfrentar situaciones de guerra’”.

Lanchipa denunció también que Chile mantiene minas antipersonales en sus fronteras desde la década de los años 1970, a pesar del compromiso de desactivarlas al firmar la Convención de Ottawa, en 1997.

“El hecho de que el gobierno chileno exija celosamente el cumplimiento del Tratado de 1904 (que definió los límites entre ambas naciones tras la guerra de 1879) en su parte referida a la delimitación fronteriza y transgreda al mismo tiempo todas sus demás claúsulas, es prueba inobjetable de que aplica una política exterior que sólo respeta las normas internacionales cuando éstas se ajustan a sus intereses”, añadió el documento.

La Paz anunció que recurrirá a tribunales internacionales por la negativa chilena de permitirle un acceso soberano al litoral.