La nadadora estadounidense Diana Nyad, de 62 años, emprenderá el domingo su cuarto intento de cruzar a nado el mar lleno de tiburones desde Cuba a Estados Unidos, para marcar un record personal y acercar a dos países distanciados por disputas políticas desde hace medio siglo.
Nyad intentará convertirse en la primera persona que cruza nadando sin jaula antitiburones los 166 km del Estrecho de Florida, desde La Habana hasta Cayo Hueso (extremo sur de Florida). El reto requerirá de unas 60 horas de esfuerzo continuo sin parar.
La nadadora, quien cumplirá 63 años el miércoles, se lanzará al mar desde la Marina Hemingway, un club de yates de La Habana, el domingo a las 07H00 locales (11H00 GMT), poco después del amanecer, según anticipó en su blog.
Nyad, cuyo récord en mar abierto data de 1979, cuando nadó 165 km entre Bimini (Bahamas) y Cayo Hueso, enfrentará una vez más las fuertes corrientes del Golfo de México y los riesgos de sufrir deshidratación, hipotermia, ataques de asma o momentos de desorientación. Para financiar la travesía ha recaudado fondos de donantes a través de su blog.
A principios de julio, las corrientes del Golfo frustraron un intento de cruzar sin jaula antitiburones el Estrecho de Florida de la nadadora británico-australiana Penny Palfrey, de 49 años, cuando llevaba en el agua 40 horas y le faltaban apenas 43 km para llegar a Cayo Hueso.
La estadounidense ha desestimado usar jaula antitiburones, dispositivo que de paso da más eficiencia a las brazadas de los nadadores.
El presidente de la Federación Cubana de Natación, Rodolfo Falcón, explicó a la AFP que la jaula antitiburones “hace turbulencias (en el agua) y ayuda considerablemente” al nadador.
Nyad cuenta con un equipo de yates y kayaks, integrado por una treintena de personas, entre ellas buzos expertos en tiburones, pues los dispositivos electrónicos que llevará no repelen a todas las especies de esos depredadores.
La nadadora también le da un significado político a su desafío, pues ha declarado que busca que “los dos países estén juntos finalmente”.
Este será el cuarto intento de la nadadora, que fue la primera en intentar cruzar el Estrecho de Florida sin una jaula antitiburones.
El 25 de setiembre de 2011, en su tercer intento, desistió tras nadar 40 horas y haber cubierto dos terceras partes del trayecto por picaduras de las carabelas portuguesas (organismos similares a medusas).
Un mes y medio antes, el 9 de agosto, había abandonado otro intento debido al asma y un fuerte oleaje, tras recorrer la mitad del trayecto en unas 29 horas.
Nyad intentó cruzar por primera vez el Estrecho de Florida en 1978, pero desistió debido al mal tiempo luego de 42 horas en el mar.
