Ernesto, degradado a tormenta tropical luego de tocar tierra en el este mexicano, se dirije el miércoles a Bahía Campeche pero seguirá provocando lluvias en partes de México y Centroamérica ante la amenaza de volver a convertirse en huracán, advirtió el miércoles el Centro Nacional de Huracanes (CNH).

El ciclón que dejó árboles caídos, lluvias y leves daños materiales a su paso por el estado mexicano de Quintana Roo, avanzaba en tierra rumbo al Golfo de México y se encontraba a 95 km de Ciudad del Carmen con vientos máximos sostenidos de 75 km/h, dijo el informe del CNH de las 16 horas (de Chile) del miércoles.

“Ernesto se dirije al extremo sur de Bahía Campeche” pero “continúa produciendo lluvias muy fuertes en partes de México y Centroamérica”, apuntó el reporte meteorológico.

Aunque en las próximas horas continuará comportándose como tormenta tropical, los expertos no descartan que “las condiciones (climatológicas) lo vuelvan a convertir en huracán el jueves”.

El centro del ciclón continuará desplazándose hacia el sur de la Península de Yucatán “en las próximas horas” y el jueves estará cerca del Golfo de México, en un área propicia para alimentar huracanes, alertó el CNH, con sede en Miami (sureste de Estados Unidos).

Ernesto que figuraba como la quinta depresión tropical de la temporada de huracanes en el Atlántico, se convirtió el martes en el segundo huracán de este ciclo que se extiende entre el 1 de junio y el 30 de noviembre.

En junio, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en inglés) indicó que sus pronósticos para este año advertían “una temporada menos activa en comparación con los últimos años”.

De acuerdo a NOAA, podrían formarse entre 9 y 15 tormentas tropicales, de las que entre 4 y 8 se transformarían en ciclones y de estos entre 1 y 3 alcanzarán las categorías 3, 4 y 5, los niveles de intensidad de huracanes más peligrosos.