“Nadie te enseña a ser madre” dice un dicho que tiene mucho de cierto. Y es que la maternidad parece ser un camino constante de ensayo y error, donde se enfrentan un sinnúmero de altibajos.

Pero pese a no ser fácil, es invaluable la satisfacción que implica esta tarea. Con el fin de orientar a las madres y también hacer que se relajen un poco, el portal Redbook recopiló consejos de los expertos para identificar algunas cosas que todas aquellas que tienen hijos deberían saber.

1. Puedes criar a un niño que sepa alimentarse bien

Christine Mastrangelo, dietista registrada en Wakefield (Inglaterra), explica que es bueno involucrar a los hijos en la cocina. “Los niños se sienten importantes cuando se les pide ayuda en la cocina, porque se enorgullecen del producto final, y además son más propensos a tener una mente abierta en torno a la comida”.

2. La maternidad es una curva de aprendizaje

Está bien cometer errores, lo importante es aprender de éstos y seguir adelante.

3. Deja que el padre también participe

Valerie Davis Raskin, psiquiatra de Chicago (Estados Unidos) y autora de libros de maternidad, dice que “en esta cultura del perfeccionismo, es fácil caer en la trampa de ‘si no lo has hecho, no lo harás bien’. Los niños quieren ser amados de diferentes maneras, y experimentar diferentes aspectos del amor. Mientras un padre no sea peligroso, es buena idea dejarlo ser”.

4. Anticipa los atuendos con tiempo

Para hacer que tus mañanas sean menos agitadas, planea el domingo la ropa que le pondrás a tu hijo durante la semana. Si a tu hijo le gusta jugar a disfrazarse, esta rutina puede convertirse en un divertido desfile de modas.

5. Ríete de ti mismo

La próxima vez que encuentres cereal en tu pelo o le hables como bebé a alguien sin pensarlo, ríete. La maternidad es divertida, difícil y graciosa, disfrútala.

6. Tienes permiso para decir mentiritas

Si de vez en cuando debes decir una mentirita para que tus hijos recojan sus juguetes, tomen una siesta o coman verduras, no te sientas culpable. Es parte del proceso.

7. No hay nada malo en disculparse

No es terrible que le pidas disculpas a tu hijo. Si bien los padres son “la autoridad” en la casa, pedirle perdón a un niño sólo es un gesto que les enseña que nadie es perfecto. De este modo, ellos comprenderán que todos cometemos errores y es mejor reconocer y aprender de ellos, para que ambos puedan seguir adelante sin rencores.

8. No te sientas culpable por trabajar o no trabajar

Olvídate del debate actual que existe en torno a si las mujeres pueden hacer todo a la vez o hacerse cargo sólo de sus hijos, y opta por la opción que más te convenga y satisfaga. Tus hijos agradecerán tener una madre feliz.

9. La maternidad no es un deporte competitivo

Si la mayoría de las madres de los compañeros de colegio o amigos de tus hijos participan en actividades del colegio o del barrio, no te sientas obligada a hacerlo. Lo mejor es compartir experiencias con otras madres e incluso reírse de los altibajos de la crianza, no competir.

10. Es normal que los hermanos peleen

Los niños son mucho más propensos a pelear con sus hermanos que con sus amigos, y se siguen amando porque el amor incondicional define a las familias. De acuerdo a los periodistas Po Bronson y Ashley Merryman, autores del libro “NurtureShock: New Thinking About Children” (NurtureShock: nuevo pensamiento acerca de los niños), los hermanos que pasan más tiempo juntos y pelean, son más unidos en el futuro que los que jugaban por separado.