El británico de origen somalí, Mohamed ‘Mo’ Farah se coló en la fiesta reservada para el mítico etíope Kenenisa Bekele, que buscaba su tercer oro olímpico consecutivo en 10.000 metros, y se hizo con el título de la prueba en los Juegos de Londres-2012.

Farah ganó con un tiempo de 27 minutos, 30 segundos y 42 centésimas, tras lanzar el sprint en la última vuelta, mientras que el norteamericano Galen Rupp (27:30.90) sorprendió a los africanos, entre los que el etíope Tariku Bekele (27:31.43), hermano menor de Kenenisa, se llevó el bronce.

Campeón del mundo de 5000 metros, Farah aportó el tercer oro de la jornada al atletismo británico, tras los triunfos de la heptatleta Jessica Ennis y del saltador de longitud Greg Rutherford.

Farah, de 29 años, es el primer atleta de nacionalidad no africana, aunque nació en Somalia, que gana la prueba de 10.000 metros en unos Juegos desde el italiano Alberto Cova, campeón en 1984 en Los Ángeles.

Hermano mayor de Tariku, Kenenisa Bekele, medalla de oro en la distancia en los Juegos de Atenas (2004) y de Pekín (2008), se hizo con la cuarta plaza.

Bekele, que se había hecho con la cabeza con un ritmo lento, había sido doble campeón olímpico (5000/10.000 metros) hace cuatro años.

Un emocionado Farah, que llegó a Gran Bretaña cuando tenía ocho años, fue aclamado por la multitud en la fiesta británica de este sábado y felicitado en la pista por su mujer Tania, embarazada de siete meses, y por su hija Rhianna.

“Simplemente no puedo creerlo, la multitud me empujó gritando cada vez más fuerte. Nunca había experimentado algo así y no pasa muy a menudo. Algo que te salga bien a un paso de una gran cantidad de gente que te anima y que grita tu nombre”, dijo Farah. “Nunca me puede pasar algo mejor. Es el mejor momento de mi vida”, añadió el vencedor.

Tras el pistoletazo de salida, Kenenisa Bekele impuso un fuerte ritmo y Farah se pegó a sus talones.

Los kenianos Wilson Kiprop y el excampeón juvenil africano Moses Masai, que fue cuarto en Atenas-2004, se unieron a ellos.

Cuando se lleva menos de la mitad de carrera, el eritreo Zersenay Tadese, excampeón mundial de campo a través, imprimió un duro ritmo a la carrera durante cinco vueltas.

A mitad de carrera, el keniano Bedan Karoki Muchiri se hizo con la cabeza al flaquear Tadese.

Kiprop dejó el primer puesto cuando quedaban unos 3.000 metros de carrera y sus compatriotas Muchiri y Masai controlaron el ritmo, mientras que Farah y su compañero de entrenamiento Galen Rupp iban detrás.

Un compacto pelotón cruzó la línea de meta a dos 2 km de la meta, con Farah y Rupp corriendo detrás de Bekele y Muchiri.

Farah atacó cuando sonó la campana de la última vuelta y el público enloqueció, saliendo detrás Muchiri, los Bekele y Rupp. Pero el británico de origen somalí pudo mantener la ventaja hasta el final.