Con las eliminaciones inesperadas de España y Uruguay, dos de los favoritos al oro olímpico en el fútbol masculino, Brasil parece encontrarse en una situación ideal para hacerse con el único título que falta en su florido palmarés.

Primero se le quitó del camino Argentina, ganador de los dos últimos oros en Atenas-2004 y Pekín-2008, al no sacar el boleto a Londres-2012 en el Campeonato Sudamericano.

Uruguay, el otro representante sudamericano en Londres-2012, fue eliminado en primera ronda del torneo olímpico tras perder ante Senegal (2-0) y Gran Bretaña (1-0), sin que sus dos estrellas, Luis Suárez y Edinson Cavani fueran capaces de marcar un solo gol en el torneo en tierras británicas.

Los tres representantes europeos, España, Suiza y Bielorrusia, que habían quedado por este orden en el Campeonato de Europa Sub-21, también fueron eliminados en la primera fase.

El caso más sorprendente fue el de España, que se presentaba como candidato alternativo al oro con Brasil, debido al buen momento que vive el fútbol del país ibérico.

La Rojita llegaba como campeón de Europa Sub-21 y tres jugadores, Juan Mata, Javi Martínez y Jordi Alba, que acababan de ganar el título continental con la absolita, siendo los dos primeros además campeones del mundo en Sudáfrica-2010.

El único representante europeo que sigue en liza es el local Gran Bretaña, con su estrella Ryan Giggs, al que Brasil derrotó el 20 de julio en un amistoso previo al torneo olímpico por 2-0, en Middlesbrough, con goles de Sandro y Neymar.

Pero las experiencias anteriores olímpicas hacen ser prudentes a los brasileños y prefieren no caer en el triunfalismo.

“Pensamos juego a juego. Ahora vienen los cuartos de final. Solo vamos a pensar en el oro si nos clasificamos para jugar la final”, afirmó el técnico, Mano Menezes.

Ante esta situación, la principal amenaza al título de Brasil parece venir de África, que se ha ilustrado en los últimos torneos, como demuestra el oro de Nigeria en Atlanta-96, que además ganó la plata en Pekín-2008, y otra presea dorada de Camerún en Sídney-2000.

Además, Brasil no tiene buenos recuerdos de ls países africanos, ya que Nigeria les derrotó en semifinales de Atlanta-96 y Camerún en cuartos de final de Sídney-2000.

Debido a ello, la amenaza más fuerte para el triunfo de Brasil se antoja Senegal, un equipo que se clasificó tras vencer a Uruguay en la primera fase por 2-0, pese a que jugó con diez hombres la última hora de partido, y cuenta con el máximo goleador del torneo, Moussa Konate, que lleva cuatro tantos.

Senegal ya había mostrado sus posibilidades de cara a este torneo cuando fue capaz de derrotar a España en un amistoso en la ciudad canaria de Maspalomas, el pasado 6 de julio, por 2-0.

Las amenazas latinoamericanas están cifradas en México, que debido a la caída de Uruguay y España ha ganado enteros a la hora llevarse una medalla, y Honduras, el primer rival de Brasil en cuartos de final.

Brasil tiene la oportunidad de su vida para ganar el anhelado oro. ¿Sabrá aprovecharla? Si no lo consiguiera, tendrá otro match-point en … Rio-2016.