Los abogados de Apple y Samsung debatieron las diferencias entre copia y competencia honesta, al presentar el martes sus argumentos de apertura en el segundo día del megajuicio en Estados Unidos por violación de patentes, que enfrenta a los dos gigantes de la tecnología.

Harold McElhinny, uno de los abogados de Apple en el proceso ante un tribunal federal de San José (California, oeste ), dijo al jurado que Samsung comenzó a copiar a la firma estadounidense apenas se presentó públicamente el iPhone en enero de 2007.

“En el mismo momento en que (el cofundador de Apple Steve) Jobs presentó el iPhone, advirtió a sus competidores que había solicitado la protección de patentes para las más de 200 nuevas invenciones en el iPhone”, afirmó McElhinny.

“Samsung podía haber inventado sus propios diseños, podía haber vencido a Apple de manera justa en el mercado. O podía copiar a Apple… es más fácil copiar que innovar”, agregó.

McElhinny dijo que Samsung copió características específicas, como el efecto rebote en la función de despliegue al llegar al final de la pantalla, o el uso del color negro en todo el dispositivo, algo que antes del iPhone no existía.

“En los más altos niveles corporativos Samsung decidió copiar cada elemento del iPhone”, afirmó.

“Esto no fue un accidente. La copia de Samsung fue intencional”.

El abogado argumentó que Samsung realizó decenas de cambios a medida que Apple actualizaba sus productos “para que el resultado final fuera idéntico al de los productos de Apple”.

En tanto el abogado de Samsung, Charles Verhoeven, contraatacó los argumentos de Apple con su propia versión de la historia de los teléfonos móviles, citando varios casos de celulares de gran pantalla anteriores al iPhone.

La empresa surcoreana no es una “copiadora” o alguien que llegó más tarde, afirmó Verhoeven, sino una gran compañía de tecnología que desarrolla sus propias innovaciones.

Y afirmó que documentos internos de Apple muestran que los diseñadores del gigante estadounidense también se inspiraron en la competencia, incluido Sony.

El iPhone era un producto “inspirador” para muchos, pero no hay nada malo en eso, afirmó Verhoeven. “¿Eso es una violación? No, eso es competencia”, señaló.

El abogado dijo que el diseño de Samsung puede distinguirse claramente del de Apple, incluso para un observador corriente.

Apple reclama más de 2.500 millones de dólares a Samsung por copiar sus diseños y patentes, mientras la firma surcoreana acusa al fabricante del iPhone de violar algunas de sus patentes para comunicaciones inalámbricas. El juicio busca desentrañar estas acusaciones cruzadas.

Google involucrado por el Android
Google no está directamente implicado en el caso, pero su sistema operativo Android es utilizado en los dispositivos de Samsung y ocupará un lugar central en el caso. Google adquirió recientemente Motorola Mobility, otro fabricante de dispositivos móviles.

Apple y Samsung, que juntas monopolizan casi la mitad (un 49,5%) del mercado mundial de teléfonos inteligentes, también se enfrentan legalmente en varios países europeos y en Australia. En Estados Unidos, Samsung está a la defensiva.

Koh ya suspendió las ventas de la tableta Samsung Galaxy de diez pulgadas y del teléfono Galaxy Nexus, concebido con Google.

Samsung podría enfrentar grandes riesgos: si Apple gana, recibirá automáticamente una orden judicial permanente sobre las ventas de dispositivos de Samsung. Y si Samsung hace sólo pequeños cambios, Apple podría pedir que la empresa surcoreana sea acusada de desacato al tribunal.

El caso tiene enormes implicaciones financieras para ambas empresas y para la floreciente industria de los dispositivos móviles.

Una encuesta realizada por la firma de investigación IDC mostró que Samsung vendió 50,2 millones de smartphones en todo el mundo en el periodo abril-junio, un alza de 172,8% con respecto al año anterior, mientras que Apple vendió sólo 26 millones de iPhones.

Samsung es el fabricante líder de teléfonos inteligentes con Android, que se ha convertido en la plataforma más popular a pesar de las demandas de Apple de que ha infringido sus patentes.