El tercer sondeo sobre elecciones municipales en Puerto Montt, realizado por la Universidad de Los Lagos, fue cuestionada por la mayoría de los candidatos.

La Universidad de Los Lagos realizo una encuesta junto al diario local, donde se entrevistó en forma presencial a 865 personas mayores de 18 años en los sectores de Alerce, Angelmo, Chin-Chin, Estación, Intendencia, La Paloma, Mirasol y Pelluco, posicionando al candidato de la alianza, Jaime Brahm (19,7%), sobre Gervoy Paredes (18,2%), por un estrecho margen de 1,5 puntos porcentuales, más abajo le siguen Raul Oliva con 6,1%, Ivan Vera 4,4% y Leopoldo Pineda con un 3,1%. Un dato importante: un 45,9%, casi la mitad de los encuestados, no sabe o no respondió a las preguntas.

Las reacciones no se hicieron esperar y Jaime Brahm de RN, criticó la actitud de quienes salieron últimos y cuestionaron la encuesta, agregando que como comando están en el camino correcto.

Por su parte, el socialista Gervoy Paredes dijo no creer en las encuestas ni menos en esta, porque no reflejan lo que aparece en las calles y poblaciones, señalando que para él, la mejor encuesta serán los votos en las urnas el día de las elecciones.

En tanto Ivan Vera, candidato independiente, solicitó transparentar los datos de la encuesta, indicando que el error en la medición fue haber considerado la baja cantidad de habitantes en Alerce y Mirasol según el censo del 2002, ya que hoy esa cantidad bordea los 50 mil personas por sector.

Finalmente el candidato del PRO, Raul Oliva dijo que ha recibido aprehensiones en detalles técnicos de la encuesta que le podrían restar validez a la representatividad de la muestra, pero dijo estar conforme con los resultados pues se consolida su campaña como una candidatura alternativa y distinta a los dos grandes bloques.

Cabe señalar que el padrón electoral en la capital regional creció luego de la aprobación de la ley de inscripción automática y voto voluntario, de aproximadamente 85 mil a 158 mil electores, donde la incertidumbre en la votación tras la denominada “crisis de representatividad” ronda por los comandos y sedes de los candidatos.