Un nuevo estudio publicado en Journal of Consumer Research determinó que las llamadas “compras excepcionales” o no presupuestadas -tales como regalos de cumpleaños, reparaciones de automóviles, chocolates caros o celebraciones- son las que causan estragos en nuestro presupuesto mensual.

De acuerdo a la investigación publicada en Eurek Alert, esta tendencia puede ser realmente perjudicial cuando cada una de esas compras aisladas comienzan a juntarse y ocurrir con una frecuencia inesperada.

“La gente falla al reconocer el número de elementos que entran en esta categoría excepcional, por lo que gastan más de lo que debieran”, señalan los autores del estudio, Abigail B. Sussman, de la Universidad de Princeton y Adam L. Alter, de la Stern School of Business de la Universidad de Nueva York.

Los expertos establecieron que los consumidores prevén los gastos cotidianos con precisión, pero subestiman la cantidad que se gasta en productos excepcionales. De hecho, aseguran que las personas están más dispuestas a pagar más por productos “ocasionales”.

“Los consumidores tienden a tratar a cada compra excepcional de forma aislada, en lugar de incorporarlo a su presupuesto como parte de una serie de compras únicas,” afirman los investigadores.

Por ejemplo, dicen los autores, si una de tus bandas favoritas realizará una presentación cerca, puede que la entrada sea cara, pero decides que vale la pena el gasto. Luego, la semana siguiente, se rompe tu televisor y compras en su reemplazo uno de precio elevado, ya que sólo adquieres uno nuevo una vez cada pocos años. Una semana más tarde, celebras tu aniversario de bodas o tu cumpleaños y como es un evento único en la vida (porque jamás volverás a cumplir la misma edad o celebrarás la misma cantidad de años de casado), crees que la ocasión amerita un derroche.

Según los especialistas, la falta de consideración de un ítem de “compras inusuales” en tu presupuesto mensual, lleva a que gastes más de lo debido. “En general, esto se traduce en un gasto excesivo y tendencia al no ahorro. La comprensión de las diferencias en la contabilización de los gastos ordinarios y excepcionales puede ayudar a los consumidores a tomar decisiones más acertadas del presupuesto”, concluyen.