El partido neonazi “Amanecer dorado” (Chryssi Avghi) confirmó el domingo su calado electoral, al obtener el 7% de los sufragios, que le permite tener 18 escaños, señal del arraigo de una ideología ultraviolenta en una Grecia desorientada por la crisis, estiman los analistas.

Son unos 430.000 griegos, un 7% de los votantes, tantos como en los comicios de mayo, los que eligieron en las elecciones del domingo enviar al parlamento a 18 diputados de este partido nacionalista y racista que en 2009 sumó 18.000 votos, sin lograr hacer entrar ni a un solo diputado.

“Chryssi Avghi llegó para quedarse”, afirmó su líder y fundador Nikos Mihaloliakos, un matemático de 55 años que había clamado su proximidad con el dictador fascista griego de antes de la Segunda Guerra Mundial Ioannis Metaxas.

Mihaloliakos fue elegido en el Consejo Municipal de Atenas en 2010 y entró en la sede bajo escolta y alzando el brazo a modo de saludo hitleriano.

“El porcentaje de Chryssi Avghi no es una casualidad, y sus electores saben a qué atenerse votando nuevamente por ellos, lo que da una señal de la tendencia actual hacia un arraigo” de esta formación en el electorado griego, afirmó a la AFP Sophia Vidali, profesora de criminología de la Universidad de Tracia.

El partido fue fundado en los años 1980 y luego entró en la semiclandestinidad. Resurgió estos últimos años aprovechando la desesperación social. Sus militantes recorrieron los barrios desfavorecidos de Atenas en donde se hacinan los inmigrantes, blanco de una cacería humana recurrente.

“Somos un movimiento nacionalista en el Parlamento y en la calle con la misión de proteger los derechos de los griegos (…), la inmigración ilegal es una plaga para Grecia”, declaró Mihaloliakos el domingo.

Militantes de su partido están acusados de múltiples agresiones y pogromos contra inmigrantes, sobre todo en el barrio desfavorecido de Aghios Panteleimonas del centro de Atenas, en donde milicias afirman actuar “en nombre de la protección de los ciudadanos” frente a los inmigrantes.

El juicio de una ex candidata de “Amanecer dorado”, que no fue elegida en las elecciones del 6 de mayo por su presunta participación en un ataque con cuchillo en septiembre de 2011 contra tres afganos, fue aplazado a fines de mayo, por sexta vez.

El portavoz del partido, Ilias Kasidiaris, que fue reelegido diputado el domingo, está también a la espera de un juicio por complicidad de robo a mano armada de un estudiante griego en 2007. Su juicio fue recientemente aplazado.

Hace diez días, Kasidiaris provocó un escándalo en el país al golpear en la cara a la diputada comunista Liana Kanelli durante un debate transmitido en directo por la televisión, lo que le valieron críticas del conjunto de la clase política.

La Liga griega de Derechos Humanos denunció en una carta dirigida al ministro interino a cargo de la policía “la impunidad” de la que gozan los autores de esas agresiones que crean un “clima de miedo”.

“El problema es que fue necesario un acto como ese, en directo por televisión, para que incluso los más indiferentes comprendan que algo no funciona bien cuando se invita a nazis a expresarse en un debate”, señaló Dimitris Psaras, un periodista experto de la extrema derecha en Grecia, en un artículo publicado recientemente por el sitio Tvxs.gr. “Y este despertar llega muy tarde”, lamenta.