El ministerio sirio de Relaciones Exteriores afirmó este sábado que “comprende” la decisión del jefe de los observadores de la ONU en Siria de suspender sus actividades, pero rechazó la responsabilidad del gobierno en el aumento de la violencia.

“El ministerio comprende la decisión tomada por el general Robert Mood (…) Los grupos terroristas armados han intensificado sus operaciones criminales, tomando como blanco sobre todo a los observadores de la ONU y amenazando sus vidas”, indicó un comunicado publicado por la agencia de noticias oficial Sana.

Los observadores de la ONU, desplegados en el país desde hace semanas para intentar que se aplique un alto el fuego, suspendieron este sábado su misión en Siria debido al aumento de la violencia.

El ministerio sirio dijo que había sido “notificado” por Mood el viernes por la noche sobre esta decisión de “reducir temporalmente la actividad de los observadores debido a lo que él llamó escalada de violencia que les tiene como blanco”.

El régimen del presidente sirio Bashar al Asad atribuye la violencia en el país, escenario de una terrible violencia desde marzo de 2011, a “grupos terroristas”.