El ministro de Economía, Pablo Logueira, descartó dar ayuda en dinero a empresas salmoneras ante la baja del precio internacional por la crisis europea.

Longueria señaló que como pocos sectores industriales chilenos, los empresarios acuícolas han experimentado un impacto negativo tras la fuerte caída en los precios internacionales del salmón a raíz de la crisis europea, puesto que afecta a los países que mayoritariamente importan el producto.

Esta situación ha generado una moderación en el desarrollo en la producción de los salmones, lo que ha provocado una preocupación en el sector cuando se estaba cambiando el modelo productivo tras la crisis del virus ISA.

Sin embargo, el titular de Economía indicó que hay que aprovechar esta caída de precios para desarrollar de mejor manera los barrios y las macro zonas salmoneras, y así evitar un colapso sanitario de la industria.

En el mismo sentido, el Secretario de Estado descartó nuevas ayudas económicas a las compañías del sector, puesto que la nueva legislación chilena permitió a las empresas salir de la crisis, agregando que esto se pudo haber evitado si hubiese existido una fuerte presencia del Estado.

El ministro Longueira puntualizó que para hacer este ordenamiento territorial de los barrios salmoneros y evitar el impacto social, tanto en las empresas como en un eventual alto desempleo los trabajadores, se mantienen congeladas las concesiones por tres años.