El primer ministro británico David Cameron dijo el miércoles que espera que la población de las islas Malvinas hable “fuerte y alto” en el referéndum que celebrará en 2013 para determinar su estatus político y que Argentina “escuche” el veredicto de las urnas.

“Los habitantes de las Falklands (denominación británica de las Malvinas) han decidido celebrar un referéndum para demostrar que creen en la autodeterminación y creo que es muy importante, porque Argentina trata continuamente de ocultar este argumento y pretende que las opiniones de los isleños no importan”, declaró en la tradicional sesión semanal de preguntas al primer ministro en el parlamento.

“Importan, espero que hablen fuerte y claro y que Argentina escuche”, agregó en la víspera de la conmemoración del 30 aniversario del fin de la corta y sangrienta guerra entre los dos países por la soberanía de las islas.

El gobierno autónomo del archipiélago austral bajo control británico desde 1833 y disputado por Argentina anunció el miércoles que celebrará un referéndum en el primer semestre de 2013 para zanjar el asunto de la soberanía.

Ni la presidenta argentina Cristina Kirchner, que llevará el jueves su reivindicación al Comité de Descolonización de la ONU en Nueva York, ni ningún miembro de su gobierno han reaccionado hasta ahora a este inesperado anuncio.

El secretario de Estado de Relaciones Exteriores David Lidington reafirmó en una declaración posterior que la consulta tenía el “pleno respaldo” del Reino Unido.

“En el pasado las islas Falkland han dejado claro que desean seguir siendo un territorio autónomo de ultramar británico (…) No tienen interés en convertirse en una provincia de Argentina”, declaró Lidington a los diputados.

El referéndum proporcionará a sus habitantes “un medio legal, justo y decisivo” para expresar su punto de vista, agregó. “Espero que Argentina y, es más, toda la comunidad internacional, tomen nota de la opinión democrática y libremente expresada de los isleños”.

“El gobierno británico seguirá ofreciendo un apoyo inequívoco a los isleños manteniendo una postura defensiva en las islas, respaldando su creciente economía, protegiendo sus derechos y deseos como hicimos hace 30 años”, afirmó.

El 30º aniversario del conflicto estuvo marcado por una escalada verbal entre ambos países, y reclamos argentinos por una “militarización” británica de la zona y la exploración de posibles recursos petroleros en esa región.

Argentina, que ha logrado el apoyo de los países latinoamericanos en el diferendo, incluida la decisión de países del Mercosur de prohibir el ingreso a sus respectivos puertos de buques con pabellón de Malvinas, anunció la semana pasada acciones legales contra las cinco petroleras británicas que llevan a cabo en aguas del archipiélago una exploración que consideran “ilegítima”.