La jefa regional de educación y la coordinadora regional de nutrición de la Fundación Integra, Paulina Godoy y Oriana Monsalve, respectivamente, entregaron recomendaciones sobre cómo prevenir las enfermedades invernales en los niños, entre estas de no abrigar demasiado a los niños cuando permanezcan en lugares calefaccionados y cerrados.

“La ropa debe ser cómoda para no dificultar el movimiento de los niños, de modo que les permita jugar; si éstos se encuentran muy arropados en lugares cerrados con mucha temperatura, les provoca sudoración excesiva. El abrigo debe aparecer sólo cuando salgan al frío”, expresó Paulina Godoy.

Manifestaron también que las bajas temperaturas y la contaminación ambiental ocasionada por el encierro y la combustión de la calefacción, ayudan a que los virus estacionales se propaguen y generen enfermedades, por eso es bueno ventilar los espacios.

Para las educadoras aunque haga frío es importante que los niños salgan a pasear un rato al aire libre, esto porque junto con fomentar la recreación de ellos permite ventilar los espacios.

Sin embargo, cuando el pequeño sale al frío, se debe tapar la nariz y boca debido a que por la nariz ingresan los virus al organismo. Al cubrir esta zona también se protege al niño de cambios bruscos de su temperatura corporal debido a la exposición al frío exterior.

Respecto a cuándo se debe cambiar la ropa, es si al jugar o correr ésta se le humedece. También evitar que mantengan los pies húmedos.

Dijeron que a pesar del frío los niños deben beber agua porque requieren hidratarse permanentemente. También es deseable que consuman frutas y verduras ricas en vitamina A y C, como zanahoria, naranja, mandarina, piña, tomate, kiwi, entre otros, ya que refuerzan el sistema inmunológico.

Para evitar que se enfermen es aconsejable lavarse las manos luego de llegar a casa porque en el exterior habitualmente existe contacto con objetos que están en espacios públicos y que pueden estar infectados con secreciones respiratorias.

Sobre qué precauciones se deben tomar cuando el niño está resfriado, usar pañuelos desechables o papel higiénico que puedan botar en el basurero una vez utilizado. También deben lavarse las manos en forma frecuente para evitar contagios.