El presidente ruso Vladimir Putin anunció el viernes que promulgó una controvertida ley que instaura multas considerables para castigar a los participantes y organizadores de acciones de protesta en caso de disturbios.

“No sólo firmé la ley, sino que estudié el expediente enviado por la Duma” (cámara baja del Parlamento ruso), que estima que este texto es comparable a los vigentes en países europeos, declaró Putin.

“Al comparar esta ley con la legislación de otros países europeos -Alemania, Italia, España, Gran Bretaña, Francia- nuestra ley no tiene disposiciones que serían más duras que las previstas por las leyes similares en los países mencionados”, agregó.

Las multas previstas en caso de manifestación no autorizada o en el caso de alteración al orden público durante manifestaciones que recibieron el aval de las autoridades podría llegar hasta los 300.000 rublos (7.300 euros) para las personas físicas.

Para las personas jurídicas -las organizaciones políticas, por ejemplo- la multa puede alcanzar un millón de rublos (más de 25.000 euros).

Un informe de expertos del Consejo Consultivo para los Derechos Humanos ante el Kremlin juzgó no obstante el jueves que esta ley viola el artículo 31 de la Constitución, que garantiza la libertad de manifestar.