La asamblea de la OEA aprobó este martes en la ciudad boliviana de Tiquipaya, una resolución que exhorta a los gobiernos de Argentina y Gran Bretaña a encontrar una solución pacífica a la disputa de soberanía sobre las islas Malvinas.

El organismo hemisférico instó a los gobiernos de ambos países “a que retomen las negociaciones a fin de encontrar en el plazo más breve posible una solución pacífica para la disputa de soberanía”, que en 1982 generara una guerra entre Londres y Buenso Aires.

El canciller argentino Héctor Timerman invitó al representante de Gran Bretaña ante la 42 asamblea de la OEA, a dialogar de inmediato para encontrar una solución definitiva al diferendo.

“Le ofrezco a Gran Bretaña que vayamos a una sala y nos reunamos. Puede estar presente el secretario general de la OEA. Quiero negociar con Gran Bretaña. Quiero resolver en forma pacífica este conflicto colonial”, dijo Timerman en la cuarta sesión plenaria del encuentro, que abordó el diferendo de las Malvinas.

Gran Bretaña, que asiste a la cita en calidad de observadora, no se pronunció, pese a que el canciller argentino dijo en una segunda intervención que estaría esperando una respuesta positiva de su parte.

Timerman lamentó que Londres ignore las 39 resoluciones aprobadas por Naciones Unidas para encontrar una solución a esta controversia territorial.

“Frente a los submarinos nucleares mi pueblo extiende la mano amiga y el olivo de la paz”, dijo el diplomático tras denunciar que las islas Malvinas son actualmente la zona más militarizada del planeta.

En la guerra de 1982, que concluyó con la rendición de las tropas del país sudamericano, entonces sometido a una dictadura militar, murieron 649 argentinos y 255 británicos.