Arabia Saudita, jefe de filas de las monarquías árabes del Golfo, exhortó este martes a Rusia a dejar de apoyar al régimen del presidente sirio Bashar al Asad y a fomentar una transición política pacífica en este país inmerso en la violencia.

“Ha llegado la hora de que Rusia pase del apoyo al régimen sirio a una acción en favor del cese de los combates y de una transición política pacífica” en ese país, declaró el ministro saudita de Relaciones Exteriores, príncipe Saud al Faisal.

El príncipe Saud respondía así a una pregunta de la AFP sobre la declaración del viceministro ruso de Relaciones Exteriores, Guenadi Gatilov, en la que afirmaba que mantener al presidente Bashar al Asad en el poder no era una condición previa para resolver el conflicto en Siria.

Un cambio de posición de Rusia “le permitirá salvaguardar sus intereses en Siria y en el mundo árabe”, estimó el príncipe durante una conferencia de prensa al final de una reunión en Yedá, en el oeste de Arabia Saudita, con sus homólogos del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG).

La posición de Rusia en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, donde se opone a una condena del régimen sirio, es “injustificable”, añadió. “Esperamos ver a Rusia reevaluar su política en la región y en particular sobre Siria ya que (…) corre el riesgo de hacerle perder mucha (credibilidad) entre los árabes”, insistió.

Al comienzo del encuentro, el príncipe Saud llamó a las monarquías del Golfo a movilizarse para ayudar a los sirios a “defenderse frente a la máquina de muerte y destrucción del gobierno”, sin precisar cómo.

El príncipe Saud, cuyo país es muy crítico con el régimen de Bashar al Asad, lamentó la continuación de las “matanzas y de los malos tratos infligidos a los civiles” en Siria.

El diario sirio Al Watan, cercano al poder, acusó el lunes a los dirigentes saudíes de “conspirar” contra Siria transformando Líbano en un “trampolín” para atacar al país.

En particular acusó al príncipe Saud al Faisal de “enviar armas a los combatientes y mercenarios que financia en el norte de Líbano”, donde los enfrentamientos entre los libaneses partidarios y opositores a Asad causaron 14 muertos entre el sábado y el domingo.