El capitán de la selección inglesa de fútbol, Steven Gerrard, admitió este lunes que se sentía frustrado por la ola de bajas por lesión que ha sufrido Inglaterra de cara a la Eurocopa-2012, que arranca el viernes en Polonia y Ucrania.

Gary Cahill se convirtió en la cuarta baja obligada para el entrenador Roy Hodgson, tras sufrir una doble fractura de mandíbula el sábado pasado durante la victoria por 1-0 ante Bélgica, en un amistoso de preparación para el torneo continental, disputado en el londinense Wembley.

El defensor del Chelsea era uno de los hombres que mejor forma tenía, luego de su excelente temporada con los ‘Blues’ que se coronó con el título de la Liga de Campeones ante Bayern en Múnich. El central era una carta fija para debutar ante Francia, el 11 de junio, por el grupo D.

Cahill deberá ver el torneo por televisión junto a su compañero del Chelsea Frank Lampard, el volante del Manchester City Gareth Barry y el portero del Norwich John Ruddy, que fueron dados de baja de la lista de 23 por lesión.

Con Jack Wilshere y Kyle Walkter en las gateras, ambos potenciales titulares para Inglaterra, Gerrard admitió que se sentía asfixiado por la mala suerte que sufre su selección.

“Perder a Gary es un golpe muy duro. Su rendimiento en los últimos seis meses había sido colosal para el Chelsea”, afirmó el líder del Liverpool.

“Fue colosal en la final de la Champions League contra el Bayern Múnich. Lo necesitábamos. Estoy enojado porque hemos perdido grandes jugadores a ocho o nueve días del torneo”, lamentó Gerrard.

“Ese es el golpe y el precio que se paga por estos partidos de preparación. Para andar bien en estos torneos, hay que tener a los grandes jugadores y perder a Gary es otro mazazo que se suma a los de Frank Lampard y Gareth Barry”, declaró el capitán de Inglaterra.

La lesión de Cahill debe doler doblemente a Hodgson porque sucedió cuando el volante belga Dries Mertens empujó al central contra el arquero Joe Hart. Enseguida, Mertens pidió disculpas a Cahill: “Fue un accidente, no fue intencional”. Pero el daño ya estaba hecho.