Ronaldinho celebró con una fiesta en gran estilo su reciente salida de Flamengo, club con el que rescindió su contrato el pasado jueves, según afirma hoy el diario Extra, vinculado a la red Globo.

De acuerdo con el medio, cuya nota es reproducida por la agencia DPA, Ronaldinho, que demanda una indemnización de 20 millones de dólares, organizó una fastuosa fiesta en su mansión de Barra da Tijuca, en Río de Janeiro, en la cual se sirvió comida japonesa, fue animada por DJs y contó, como ya es tradicional en las fiestas que organiza Ronaldinho, con la infaltable “cervecita” y un promedio de cinco mujeres por hombre.

“Ahora voy a dejarme llevar por la vida. Va a haber fiesta todos los días”, dijo el ex astro de Barcelona, citado por el rotativo. La información contradice lo dicho por el propio “R10″, quien al ser anunciada su salida del Flamengo, afirmó que se dedicaría a cuidar a su madre, quien se encuentra internada en un hospital de Porto Alegre tras pasar por una delicada cirugía.

Tras anunciar su salida, el club le declaró la guerra a “R10″: anunció que recurrirá a la Justicia para demostrar que la deuda acumulada con Ronaldinho no alcanza los 20 millones de dólares, su presidenta, Patricia Amorim, tiró a la basura una foto suya junto a Ronaldinho, que ella tenía sobre su escritorio, y el lunes será retirado del segundo piso de la sede del club un panel con la imagen del ex astro junto a la frase “Flamengo es Flamengo”.