La organización internacional de conservación marina Oceana llamó a las autoridades de gobierno a ordenar la paralización inmediata de las industrias de Ventanas que queman carbón y otros combustibles fósiles, debido a los sucesivos peaks de contaminación por dióxido de azufre que han afectado a la comuna de Quintero esta semana. En el día de hoy este contaminante alcanzó un nivel de 5300 mil ug/m3, lo que supera en 5 veces los niveles permitidos a nivel nacional y en más de 10 los niveles permitidos por la Organización Mundial de la Salud.

“Tal como lo hizo con Agrosuper en Freirina, el Gobierno debería paralizar ahora mismo las industrias contaminantes de Ventanas como la Fundición de Codelco y las termoeléctricas de AES Gener. Está claro que dichas empresas no han podido evitar episodios reiterados de contaminación. De no hacerlo, las autoridades de salud y medioambiente estarían incumpliendo gravemente su deber constitucional de proteger la salud e integridad de la población” enfatizó el director ejecutivo de Oceana, Alex Muñoz.

La organización agregó que toxicólogos especialistas han advertido que las personas sometidas a estos niveles de contaminación se exponen a serias complicaciones respiratorias, pudiendo generar cuadros de asma y hasta paros respiratorios, además de generar enfermedades crónicas.

El director de Oceana criticó, además, los plazos que dio a conocer ayer el Seremi de Medio Ambiente Hernán Bucher, para detener las emanaciones de gases tóxicos de las industrias que operan en la comuna de Puchuncaví. Bucher señaló que se dará un periodo de 4 años a las industrias del sector para que cesen sus emanaciones de gases contaminantes, tiempo suficiente, a juicio del Seremi, para que las empresas incorporen nuevas tecnologías que les permitirían dejar de emitir gases tóxicos para la población.

“Todo indica que la autoridad ambiental aún no comprende la gravedad de la situación de Puchuncaví y Quintero ni la urgencia de tomar medidas drásticas para detener ahora la operación de aquellas industrias que emiten la contaminación que agobia todos los días a los habitantes, y que degrada un ecosistema marino que era sano y productivo sólo hace algunas décadas”, comentó Alex Muñoz.

Oceana ha propuesto un plan integral para la recuperación de Puchuncaví y Quintero que incluye la paralización inmediata de las industrias responsables de las emanaciones de gases tóxicos, el cierre de la fundición de cobre de Codelco-Ventanas y la prohibición de la entrada en funcionamiento de nuevas industrias a carbón, como las plantas termoeléctricas Campiche y Energía Minera. Además, propuso el levantamiento de una línea de base de la contaminación del sector, y la elaboración de un plan de descontaminación capaz de reducir drásticamente los niveles de contaminación de esta zona. Finalmente, Oceana llamó a que se apruebe urgentemente una estricta norma de emisiones para fundiciones, basada en los límites fijados por la Organización Mundial de la Salud. La organización también ha enfatizado la necesidad de compensar a los pescadores artesanales y otros grupos cuyas actividades económicas se han visto gravemente afectadas durante muchos años.