Declarada como tesoro humano vivo por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes y nominada enTRE las 50 mujeres protagonistas del Bicentenario de la República de Chile, Cristina Calderón es la última testigo del pueblo Yámana cumple 84 años.

Nacida a pocos kilómetros de Puerto Williams, sobre la isla Navarino en el sector de Róbalo, la abuela Cristina, como todos la conocen, tuvo 9 hijos, de los cuales hay 7 vivos, junto con 14 nietos y numerosos bisnietos.

Hija Ilustre de Magallanes, es depositaria y única hablante de su lengua originaria, en serio peligro de desaparecer. Sin embargo, gracias a un reciente programa de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi) será posible volver a difundirla y enseñarla.

Según Prensa Antártica, la abuela Cristina es una mujer muy activa. Es habitual verla trabajar en cestería con juncos que crecen en los alrededores de la ciudad, gracias a una técnica utilizada por sus propios antepasados, que ella se ha encargado de mantener.

La vida de ella y de su pueblo canoero ha sido objeto de inspiración para el trabajo de los más destacados estudiosos, historiadores, antropólogos y escritores de todo el mundo, quienes han intentado retratar la vida de la comunidad más austral del planeta.

Actualmente, Cristina Calderón vive en Villa Ukika, frente al canal Beagle, en las afueras de Puerto Williams.