Hasta la Superintendencia de Servicios Sanitarios llegó el alcalde de Quillota, Luis Mella, para denunciar los persistentes malos olores provenientes de una planta de tratamiento de aguas servidas de la empresa Esval.

El jefe comunal, explicó que debido a ésto la sanitaria no debería cobrar el item de “tratamiento de aguas”, por cuanto se trata de un servicio que presta de mala forma y sería una eficaz medida de presión para que la sanitaria adopte las medidas inmediatas tendientes a solucionar el problema.

Pese que actualmente Esval tiene plazo hasta septiembre de este año para implementar soluciones técnicas, a los vecinos les resulta “excesivo e inaceptable” ese período.

La superintendente de Servicios Sanitarios, Magaly Espinoza, admitió que la compañía fracaso en el programa que había implementado para paliar los olores, por lo que buscan medidas más drásticas para solucionar este problema.

La autoridad manifestó que apoya a los vecinos y al municipio en cuanto a que el nuevo plazo es excesivo e indicó que se ha abierto un proceso de sanción el cual no descarta prohibir el cobro por “tratamiento de aguas” si se logran los fundamentos administrativos y jurídicos para ello.