La sociedad estadounidense SpaceX lanzó este martes exitosamente desde Florida (sureste) la cápsula Dragon sin tripulantes a bordo de un cohete Falcón 9 en dirección a la Estación Espacial Internacional (ISS).

El cohete despegó del polígono de Cabo Cañaveral (sureste de Florida) a las 03:44 horas al cabo de una cuenta regresiva sin problemas, y tres días después de un lanzamiento anulado.

Diez minutos después del despegue, Dragon se separó de la segunda etapa del cohete y alcanzó la órbita terrestre.

Un minuto después, la nave desplegó sus antenas solares y comenzó a acercarse a la ISS que se encuentra a 350 kilómetros de altitud y a la que debería llegar el jueves.

Dragón efectuará una serie de maniobras y de pruebas y si todo se desarrolla como previsto, la NASA dará la autorización para un acomplamiento el viernes a las 12:06, que se efectuará mediante un brazo robótico de la ISS controlado por dos de los seis astronautas a bordo.

Elon Musk, de 40 años, fundador y titular de SpaceX, dijo a la prensa que el mundo “esta alumbrando una nueva era en la exploración espacial en la cual las asociaciones privadas tendrán un papel cada vez mayor”, al hacer una comparación con Internet, sector en el que amasó su fortuna.

“El éxito de esta misión hasta el momento augura esta nueva era de la exploración espacial”, agregó desde la sede de SpaceX en Hawthornem, California.

Este vuelo de prueba tiene como objetivo mostrar que el sector privado está en camino de restaurar el acceso de Estados Unidos a la ISS, tras el retiro de la flota de transbordadores espaciales de la NASA el año pasado.

En este vuelo, la cápsula Dragon no viaja con tripulación, pero seis astronautas en el laboratorio espacial permitirán la descarga y posterior carga de la cápsula, que llevará suministros a la ISS y regresará con otros materiales a la Tierra.

El intento de lanzamiento el sábado fue anulado en el último segundo cuando las computadoras detectaron alta presión en el motor central del Falcon 9.

Los ingenieros de SpaceX descubrieron que la causa principal del problema había sido una válvula de retención defectuosa y las reparaciones se completaron el domingo, indicó la compañía con sede en California.

SpaceX es la primera de varias empresas estadounidenses que intentan enviar su propia nave de carga a la ISS con el objetivo de garantizar el acceso al espacio de Estados Unidos para transportar viajeros en 2015.

La compañía ya hizo historia con el lanzamiento de la cápsula Dragon en diciembre de 2010, convirtiéndose en la primera empresa comercial en poner en órbita una nave espacial y regresarla a la Tierra.

Su cápsula Dragon, reutilizable, fue construida para transportar tanto carga como una tripulación de hasta siete miembros.

Hasta ahora sólo las agencias espaciales de Rusia, Japón y Europa han sido capaces de enviar naves de suministro a la ISS.

Estados Unidos también lo hacía hasta el año pasado, cuando puso fin a su icónico programa del transbordador espacial, que durante tres décadas transportó tanto astronautas como material para ensamblar el laboratorio orbital.

El retiro de los transbordadores dejó a Rusia como el único país capaz de llevar astronautas a la ISS hasta que la industria privada logre un reemplazo.

La agencia espacial estadounidense le dio a SpaceX unos 390 millones de dólares hasta el momento, del total de 680 millones que SpaceX ha gastado en el desarrollo de la cápsula de carga, de acuerdo con la presidente de SpaceX, Gwynne Shotwell .

SpaceX también recibe financiación de la NASA para otro proyecto de desarrollo de un vehículo tripulado para llevar astronautas al espacio. Otras competidoras en este tema son Blue Origen, Boeing y Sierra Nevada.

En unos pocos años, Shotwell espera que SpaceX pueda rebajar el alto precio que la NASA paga a Rusia por trasladar astronautas de Estados Unidos a bordo de la cápsula espacial Soyuz, de unos 63 millones de dólares el pasaje.