Uno de los montajes más destacados del dramaturgo y director Ramón Griffero se presentará en el Teatro Principal de M100 del 17 de mayo al 8 de julio, para inquietar y sorprender con su puesta en escena e interpretaciones. Con las actuaciones de Paulina Urrutia, Constanza Rodríguez, Matías Oviedo, Omar Morán y Sebastián Layseca.

“Cuando la política ya no habla de la muerte, del universo, de los sentidos de vida, de los deseos y pulsiones del ser humano, de la felicidad del estar y del alma, el arte queda como el lugar que aborda estas dimensiones fundamentales de la existencia y construye espacios para elaborar las ficciones del mañana” expresa Griffero sobre la misión de su montaje. Esta obra ha sido estrenada por compañías de: Mexico, Costa Rica, Portugal (Lisboa), España (Galicia), Francia (Marsella), Brasil (Porto Alegre-Bahia) y Argentina, demostrando su carácter global y lo actualizado de sus conceptos.

El afamado director y dramaturgo Ramón Griffero (“Cinema-Utoppia”, “Río Abajo”, “Las capas de la ira”) y su Teatro Fin de Siglo vuelve al Centro Cultural Matucana 100 con una de sus obras más importantes del último tiempo: “Tus Deseos en Fragmentos”. Montaje que se hizo merecedor de los premios a Dramaturgia, Dirección y Montaje en los Apes 2003 y nominado a Dirección y Dramaturgia en los Altazor edición 2004.

La connotada obra estará en cartelera del viernes 18 de mayo al domingo 8 de julio, de jueves a sábado a las 20.30 hrs; y los domingos a las 20 hrs ($5000 General, $3000 Estudiantes y Tercera Edad, $2000 Jueves Popular).

“Tus deseos en Fragmentos” brilla por su representación escénica  a través de un delirante recorrido por el laberinto de las emociones y la mente humana, a partir del concepto de invitar a los espectadores a visitar este museo interno donde la soledad, el miedo, las pulsiones y los deseos de los personajes representan una realidad llena de problemas sociales, sexuales y morales.

Con las actuaciones de Paulina Urrutia, Constanza Rodríguez, Omar Morán, Sebastián Layseca y Matías Oviedo, un gran elenco que se desenvuelve en un escenario moderno, violento y onírico intensificando las sensaciones y la fuerza de las historias. En este montaje, Griffero profundiza la aplicación escénica de su concepto de dramaturgia del espacio, donde las actuaciones corporales y el texto generan junto a la música y la iluminación una gran poética de espacio.

La escenografía -de Javiera Torres-, se construye a partir de una estructura que genera efectos opticos, dándole a la escena, un movimiento plástico que se une a los fragmentos de los textos de la obra.