Representantes de la Cámara Chilena del Libro y de Editores de Chile firmaron un importante acuerdo, por el cual ambas entidades se reconocen y respetan como pares en el desarrollo del libro y la lectura en Chile.

Dichas instituciones declaran que objetivos comunes les demandan unidad de acción ante políticas públicas y desafíos futuros del libro.

Algunas de las tareas a encarar conjuntamente, indican, son activar la política nacional del libro y la lectura, una nueva ley del libro, el fortalecimiento de la creación y la edición, la red de librerías y bibliotecas, además de potenciar a Chile como un país de lectores como los nuevos tiempos exigen.