Los congresistas de Estados Unidos y activistas reclamaron este martes seguir presionando a China hasta que autorice al disidente Chen Guangcheng a abandonar el país.

“Les pediría (a las autoridades chinas) que no se olviden de Chen y su familia, y de otros que están poniendo en riesgo su seguridad y sus vidas por él”, manifestó el congresista republicano Chris Smith, que ha presidido las audiencias realizadas para seguir la situación de Chen.

“La historia, desgraciadamente, está lejos de haber terminado”, añadió Smith.

Washington aseguró el pasado 4 de mayo que China permitiría al abogado ciego viajar a Estados Unidos para estudiar, después de que éste se refugiara en la embajada estadounidense de Pekín tras huir del arresto domiciliario al que estaba sometido.

Chen -un duro crítico de las políticas del hijo único en China- sigue ingresado en un hospital de Pekín recibiendo un tratamiento por unas heridas, mientras las autoridades chinas siguen sin ofrecer una salida a su situación.

Por su parte, la portavoz del Departamento de Estado Victoria Nuland aseguró que “todos los trámites necesarios en Estados Unidos están completos” para otorgar visas a Chen, su esposa y sus dos hijos.

“Estamos listos, para cuando él y su gobierno lo estén también”, añadió.

Bob Fu, un activista y amigo de Chen, aseguró que espera que el disidente y su familia puedan viajar a Estados Unidos “muy pronto”.

“Espero que el Congreso haga más por controlar y urgir a la administración para asegurarse de que los derechos civiles de Chen Guangcheng y su familia son protegidos por la ley”, dijo Fu, fundador del grupo ChinaAid, durante una audiencia en el Congreso.