Continúa la incertidumbre por la ubicación que tendrá el nuevo centro de reclusión juvenil del Sename en Puerto Montt. El seremi de Justicia no descartó la opción de construir el establecimiento en Alerce, pese al rechazo que ha generado el anuncio en la comunidad.

El seremi Marcos Velásquez anunció que, de un total de 15 terrenos analizados por profesionales del Ministerio de Justicia y del Sename en la región de Los Lagos, son dos los que cuentan con los requerimientos más adecuados para levantar un nuevo penal juvenil que reemplace al colapsado centro de Chin Chin.

Uno de ellos, según indicó, es un terreno de 13,7 hectáreas de superficie ubicado a 3 kilómetros del límite urbano de la localidad de Alerce, específicamente en el sector La Colonia, lo que, tras difundirse entre los dirigentes sociales y vecinos del sector, provocó un claro rechazo.

Surgió entonces como otra alternativa un terreno municipal de 5,2 hectáreas ubicado en el sector Alto Bonito cedido en comodato el año 2004 a Conaf, convenio que el Concejo Municipal deshizo este martes ya que dicha Corporación nunca habría hecho uso de este terreno.

Sin embargo, el seremi sostuvo que, antes de dar luz verde a esta nueva alternativa, se requiere que el concejo de ediles ceda ahora este terreno en comodato al Ministerio de Justicia y, a partir de eso, sostener reuniones con los dirigentes y vecinos del sector, no descartándose que surja un nuevo conflicto con esta comunidad.

No obstante, la decisión final aún no está tomada, indicó el seremi, no descartando levantar el nuevo centro de reclusion juvenil en las proximidades de Alerce, dada la urgencia y la necesidad de contar con un establecimiento más amplio y más moderno, como el que requiere la nueva ley.

Por último, el seremi de Justicia sostuvo que el Ministerio no tiene establecido plazos fijos para definir el lugar donde será levantado el nuevo recinto regional que requiere un mínimo de 4,5 hectáreas de superficie para su construcción, proyecto que, antes de su ejecución, deberá considerar la opinión formal de la comunidad a través del Sistema de Evaluación Ambiental.