La adolescencia es una época clave para enseñar hábitos de gasto responsable y destrezas de manejo de dinero. Sobre todo si tus hijos son de los que gastan sin límite.

Si estás en el proceso de inculcar a tus “pupilos” la moderación en el consumo, te presentamos a continuación algunos tips de cómo abarcar estos temas, recopilados por VISA.

1. Establece límites. Aún si puedes comprar todo lo que tu hijo adolescente te pide, abstente de consentirlo demasiado. Al dejarte llevar por cada capricho, puedes estar limitándole a tu hijo la capacidad de valorar el dinero y la motivación de trabajar. Sé firme con los límites que estableces – el ser consistente es sumamente importante para darle a tus hijos un buen ejemplo.

2. Ayúdalo a distinguir entre lo que quiere (entretenimiento, regalos, antojos, música) y lo que necesita (útiles escolares, teléfono móvil y/o transporte). Mientras mejor pueda distinguir entre sus necesidades y sus deseos, tendrá mayor probabilidad de lograr el éxito en sus finanzas personales como adulto.

3. Crea un Plan Financiero junto a tu hijo: Crea un plan financiero básico que incluya un listado de gastos para estar al tanto de sus hábitos de consumo, como también una lista de los gastos que “necesita” y los que “desea”, estimando así los costos y estableciendo metas de ahorro.

4. Usa las herramientas financieras disponibles. Siéntate con tu hijo por lo menos una vez por mes para revisar sus planes de presupuesto y sus ahorros. Incentívalo a aprender más acerca de las finanzas a través de ejemplos reales de la vida cotidiana y estableciendo metas a largo plazo – esto lo ayudará a visualizar las realidades de ser un adulto financieramente responsable y lo preparará para el futuro. El efectivo es una manera riesgosa de manejar el dinero – no sólo es propenso a perderse, sino también, el tener efectivo a la mano puede tentar a tus hijos a hacer compras impulsivas y perder el control de sus gastos. Incentiva a tu hijo que mantenga su dinero en un lugar seguro, ya sea en casa o a través de un producto monetario como:

a. Prepago. Las tarjetas prepago son una buena herramienta para que los adolescentes estén conscientes de sus gastos, guarden su dinero en un lugar seguro y tomen una gama más amplia de decisiones de compra – como pueden ser las compras en línea, las compras a través de un teléfono móvil, o retirar dinero de un cajero automático. También pueden ayudarlos a mantener un presupuesto, ya que no les permite endeudarse.

b. Débito. Un gran paso adelante hacia permitir que tu hijo administre su propio presupuesto es a través de una cuenta corriente con tarjeta de débito. A través de esta herramienta, podrá aprender a mantener un mejor control de sus gastos y analizarlos para mejor planificación de presupuesto.

c. Ahorros. Cuando ya haya acumulado un monto significativo de ahorros, sugiérele abrir una cuenta de ahorros en un banco local. Esto le ayudará a ejercer destrezas básicas de ahorro y lo incentivará a tomar mejores decisiones de gasto.

d. Crédito. Asegúrate de enseñarle a tu hijo adolescente cómo utilizar una tarjeta de crédito de manera responsable. Es una lección que lo ayudará evitar los peligros del endeudamiento a futuro.

5. Mantén comunicación constante. Incentívalo a aprender más acerca de las finanzas a través de ejemplos reales de la vida cotidiana y estableciendo metas a largo plazo – esto lo ayudará a visualizar las realidades de ser un adulto financieramente responsable y lo preparará para el futuro.

Tips para teens: haciendo rendir tu dinero

1. Fíjate en tus gastos.

a. Haz un listado de tus gastos en las últimas dos semanas, separando las compras en dos categorías: “necesidades” (útiles escolares, teléfono móvil y/o transporte) y “antojos” (música, ropa o videojuegos).
b. Revisa tu listado. ¿Hay algún gasto que puedas clasificar como “no necesario” – como papitas fritas, goma de mascar, etc.? Las compras impulsivas pueden limitar tu presupuesto. Piénsalo dos veces antes de gastar en estas compras, podrías ahorrar mucho dinero si logras limitarte.

2. Haz un plan.

a. En base a tus “necesidades”, establece un presupuesto. No te olvides de incluir un poquito más de dinero extra para que puedas gastar en tus “antojos” también.

b. Escribe un listado largo de “antojos” – puede incluir gastos pequeños (como una camisa nueva o un CD) y gastos significativos (como un teléfono móvil nuevo o una computadora). Calcula cuánto te costarían todos estos “antojos” y establece un presupuesto y un plan de ahorros que te permita comprarlos poco a poco.

3. Evita cargar mucho efectivo.

a. El efectivo es una manera riesgosa de manejar el dinero – no sólo se presta para que lo pierdas, sino el tenerlo a la mano puede tentarte a comprar cosas que no necesitas y que pierdas el control sobre tus gastos. Las tarjetas de pago pueden ayudarte a mantener un mejor control de tus gastos, facilitándote el manejo de tu presupuesto.

b. Trata de guardar tu dinero en un lugar seguro y habla con tus papás para ver qué método sería el mejor para ti – ya sea mantenerlo en casa o a través de algún producto de pago como las tarjetas prepagadas, tarjetas de débito, cuentas de ahorro, etc.

4. Mantén un control de tus gastos y tus ahorros.

Siéntate a revisar tus planes de presupuesto y tus ahorros periódicamente. ¿Estás cumpliendo con tus planes de presupuesto? Si no, mira en dónde es que se te están yendo tus gastos para reevaluar tus metas de ahorro o para cortar algunos de tus gastos para que no pares gastando de más.