Posiciones encontradas registran parlamentarios de la zona, respecto del sueldo mínimo y un eventual aumento de éste a 250 mil pesos. Desde la oposición coinciden en incrementar las cifras actuales, mientras que el oficialismo prefiere un “salario ético familiar”.

Existe coincidencia en la sociedad: nadie puede vivir con 182 mil pesos mensuales y los llamados de atención del mundo laboral quedaron reflejados en las calles.

En tanto en el Congreso los representantes de la región dividen posiciones. El senador del MAS, Alejandro Navarro, manifestó la necesidad de incrementar las remuneraciones y comprometió su esfuerzo en esa lucha.

Eso sí, en la UDI la posición es distinta. El diputado Jorge Ulloa se inclina por un sueldo ético, con el cual las familias puedan contar con un ingreso estándar mínimo, para lo que se deberán buscar mecanismos que posibiliten aquello, comentó el parlamentario.

A su vez, el diputado de la DC José Miguel Ortiz, manifestó su respaldo a un aumento gradual.

La ministra del Trabajo Evelyn Matthei, expresó su desacuerdo con llegar a 250 mil pesos como salario mínimo por el riesgo en el aumento de la cesantía. En la práctica, según organismos laborales, en Chile más de 700 mil trabajadores percibe mensual menos del salario mínimo.