Un artefacto explosivo que no alcanzó a detonar completamente fue encontrado tras el mausoleo de Carabineros al interior del cementerio municipal de Temuco, al tiempo que un llamado telefónico alertó sobre la instalación de un elemento similar en el campus norte de la Universidad Católica de Temuco.

Una publicación en Internet activó la alerta de los servicios policiales que rápidamente se constituyeron en el cementerio municipal de Temuco, específicamente tras el Mausoleo de Carabineros, emplazado junto al cerco perimetral del recinto, paralelo a calle Carrera, donde fue encontrado un extintor cargado con casi medio kilo de pólvora, gas butano y mecha lenta, que supuestamente se activaría con un sistema de relojería.

Sin embargo por algún problema el artefacto solo generó la combustión de la mecha sin explotar, confirmando el fiscal del Ministerio Público, Omar Mérida, que en Internet se avisó de la instalación del artefacto.

Precisamente una publicación en un sitio en Internet alertó del hecho, aunque lo anunciaba en una Comisaría de Carabineros, señalando que en el texto que “en la madrugada del uno de mayo alrededor de las 4 horas se instaló un paquete explosivo entre el muro de calle Carrera y la pared del panteón de los pacos en el cementerio de Temuco ubicado en calle Balmaceda”.

Se agrega que se trata de “un extintor con cerca de 400 gramos de pólvora y dos latas de gas propano programada por un mecanismo de relojería para que se active algunos minutos después de ser dejado, alrededor de las 4:30 de la mañana ya que a esta hora el tránsito de personas es escaso, y nadie que no estuviera contemplado saldría dañado”.

También informan que algo falló pues el artefacto no explotó y sigue en el lugar, atribuyéndoselo los autodenominados “lúmpenes destructivos Rodrigo Donoso Jiménez y José Huenante”.

Carabineros tras constituirse en el lugar y verificar el hecho, aisló el sector aledaño al Mausoleo, mientras personal del Grupo de Operaciones Policiales Especiales, GOPE, desactivó el artefacto e inició las pericias respectivas.

Mientras esto ocurría en la Central de Comunicaciones de Carabineros, Cenco, se recibió un llamado telefónico, alertando sobre la instalación de un artefacto explosivo en el campus norte de la UCT. Por lo que tras ser informado, el rector Alberto Vasquez, junto con autorizar el ingreso de Carabineros, decidió suspender las actividades en el recinto durante esta jornada.

El fiscal Omar Merida lidera el procedimiento impartiendo las instrucciones a Carabineros para recabar los antecedentes que permitan ubicar a los autores de estos hechos, confirmando el representante del Ministerio Público, que el tipo de artefacto encontrado en el cementerio, es de alto poder desstructivo y similar a los detectados en la region Metropolitana.