A temprana edad los niños interactúan en las redes sociales, lo que significa que muchos estén por horas sin ningún tipo de monitoreo. Por ello, los padres estadounidenses no dudan en iniciar sesión en las cuentas de Facebook de sus hijos, con tal de poder vigilarlos.

Un reciente estudio realizado por AVG, una empresa especialista en programas tecnológicos de seguridad, y recogido por el portal de noticias AllFacebook, reveló impresionantes cifras sobre desconfianza entre padres e hijos.

Los resultados muestran que cerca de un 61% de los padres admitió iniciar sesión la cuenta de Facebook de su hijo sin decirle. Por otra parte, 72% de los padres dice que se agregaron como amigo a su hijo en Facebook para controlar su comportamiento.

Más datos agregan que un 20% de los progenitores sospechan que sus niños acceden a contenido pornográfico o descargan música ilegalmente.

También existe un 20% de los padres que cree que sus jóvenes intercambian fotografías de ellos mismos desnudos con otros muchachos, y otro 20% que piensa que sus hijos lo hacen a través de celulares.

Los datos revelan una importante desconfianza y temor por parte de los padres sobre lo que hacen sus hijos en las redes sociales. Del total encuestado un 20% dice haber encontrado “mensajes explícitos” en las cuentas de sus hijos.

Finalmente, un 80% de los padres piensa que sus adolescentes tienen amigos virtuales que no conocen en persona.

El estudio concluye que los padres no son conscientes de la forma en la que sus hijos se involucran en Facebook, y cuando no existe una confianza base desde la niñez, en la adolescencia ya existe mucha libertad como para vigilarlos.

Además, los resultados de la encuesta explican una serio problema de violación a la privacidad en Internet hacia los jóvenes.

Para remediar la situación, AVG sugiere que los padres hablen abiertamente con sus niños sobre su actividad en la red, para que así exista una comunicación que transparente qué hacen y con quién se comunican sus hijos en Internet.