Un grupo de científicos de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España, logró elaborar un bizcocho saludable.

Para crear este alimento, que tiene un 20% menos de calorías, se reemplazaron las grasas por inulina, fibra natural extraída de la raíz de la achicoria y que además de tener un aporte calórico bajísimo, trae una serie de beneficios al organismo, consigna ABC.

“Refuerza el sistema inmune, aumenta la biodisponibilidad de minerales como el magnesio o el calcio y mejora la respuesta glucémica”, indicó una de las participantes de la investigación, Julia Rodríguez.

Los especialistas lograron suplir cerca de un 70% del aceite que se usa para elabora un esponjoso bizcocho.

La académica del Departamento de Tecnología de Alimentos de la UPV, Isabel Hernando, señaló que con esto se pretende “reducir los niveles de obesidad que hay en la población actual. Para ello elegimos un alimento popular como los bizcochos y quitamos la grasa que aporta muchas calorías y la sustituimos por otro ingrediente, la inulina, que tiene propiedades beneficiosas”. .

Cabe consignar que la inulina es usada en alimentos, como fibra, pero no parar sustituir las grasas. Por ello, Hernaldo cree que sería ideal aplicar este sistema en las golosinas y bocadillos que se venden. “Sería muy fácil de implementar en la industria alimentaria”, indicó.

Pero, ¿es posible fabricar este bizcocho en casa? La respuesta es sí. La receta es muy parecida a la de un bizcocho tradicional: Primero, hay que batir las claras a punto de nieve por alrededor de 2 minutos, luego se añade el azúcar (o endulzante), yemas, la mitad de la porción de leche, harina, bicarbonato, y por último, se agrega lo que queda de leche, el aceite y la inulina. Enseguida, se hornea por cerca de 49 minutos, a una temperatura de 160º.

En tanto, el UPV y CSIC pretenden aplicar la misma técnica en galletas y magdalenas.