Estados Unidos reiteró su llamado a Siria para que cumpla con todos los puntos del plan de transición de Kofi Annan, respaldado por las Naciones Unidas, y calificó de “frágil” el cese del fuego, al día siguiente de su entrada en vigor.
El plan de Annan “no es un menú. Es una serie de obligaciones, entonces debemos ver que van cumpliendo todos los elementos” incluidos en él, señaló el viernes a la prensa Mark Toner, portavoz del Departamento de Estado.
Más allá del cese de las hostilidades, el acuerdo prevé establecer un diálogo político, acceso humanitario a todo el país y la liberación de los opositores detenidos.
Pese a la tregua, que rige desde el jueves a primera hora, al menos cinco civiles murieron el viernes según la oposición siria, mientras que miles de personas se manifestaron contra el régimen del presidente Bashar al Asad.
En Washington, el portavoz Mark Toner habló en cambio de entre siete y diez muertos el viernes.
El alto el fuego “se puede describir, como mucho, de frágil. Pero es un primer paso. Queremos avanzar a partir de esto”, enfatizó.
